Alrededor de 200 mil hectáreas bajo las aguas e inundaciones, es el resultado de la situación que ocurre en la zona, siendo especialmente crítica en las pequeñas localidades de Nehuentúe, Tranapuente y sectores aislados como Curarrehue y algunas zonas de Galvarino y Lumaco.

El devastador fenómeno climático ya ha cobrado cuatro víctimas fatales; uno de ellos falleció prestando sus servicios como botero voluntario colaborando en el rescate de sus vecinos; otros han fallecido intentando rescatar sus pertenencias o protegiendo sus animales de las consecuencias de las inundaciones.

La situación continúa siendo dramática, porque miles de casas están prácticamente sumergidas en el agua y otras han sido arrastradas por los caudales y muchos sectores permanecen aislados por el corte de caminos o puentes. En gran parte de la zona afectada, los únicos medios de conectividad son botes, incluso en muchos de estos poblados, los botes navegan por sus calles principales donde el agua supera el metro de altura.


El llamado a la comunidad

Los expertos nos llaman a tomar conciencia que los cambios del clima y las catástrofes naturales ocurridas en el mundo en los últimos años, son efecto de la relación depredatoria que hemos establecido con la naturaleza, de esta manera a las transformaciones globales, los riesgos y las consecuencias se registran a escala local.

Por lo anterior, el llamado de esta campaña que inicia la Iglesia de Temuco, se orienta a sumar esfuerzos por colaborar en la etapa inicial de recolectar ayuda de emergencia, además de asumir una mirada a más largo plazo sobre las consecuencias de la situación vivida y como nos organizamos como sociedad para prever sus efectos futuros.

En lo inmediato el llamado es a la comunidad de Temuco, para entregar sus aportes en las parroquias de sus sectores, fundamentalmente de alimentos no perecibles, que serán distribuidos en los sectores afectados de las comunas costeras de Imperial, Carahue, Galvarino y la Localidad de Labranza de Temuco. A las demás comunas de la Diócesis, el llamado es a entregar sus aportes en sus parroquias las que se encargarán de distribuirlos en los sectores más afectados de cada decanato.

También se hace un llamado a colaborar en dinero, el cual se utilizará fundamentalmente en la compra de carbón para las familias afectadas. Para ellos e cuenta con una cuenta de Caritas Chile N° 000 – 00117- 01 del Banco de Chile.

Finalmente, un llamado a sumar los esfuerzos que se realicen desde la sociedad civil a las acciones que están realizando las autoridades comunales, regionales y nacionales y a la Oficina Nacional de Emergencias en la organización, identificación y distribución de las colaboraciones y recursos reunidos.



Fuente: Comunicaciones Temuco