“Anda y Haz tú lo mismo”. La Buena Noticia de la Solidaridad es el título de la primera Carta Pastoral que Mons. Ignacio Ducasse, dirige a los fieles de la Diócesis de Valdivia y a todos los hombres y mujeres de buena voluntad.
En conferencia de prensa ofrecida por Mons. Ignacio acompañado por Rafael Perdomo, Coordinador diocesano de la Pastoral Social y Ramón Sanhueza, director ejecutivo de la Fundación diocesana para el Desarrollo Social de Valdivia, Fundesval, la Carta fue presentada a toda la comunidad valdiviana.
Rafael Perdomo, quien presentó la publicación, destacó que “la Carta recoge cuatro aspectos de lo que tendría que ser la solidaridad hoy en nuestra Iglesia. Primero, que sea una solidaridad significativa, es decir, nuestra pretensión y desafío no es tanto solucionar los problemas de la sociedad pues no tenemos la capacidad y recursos para hacerlo, pero sí mostrar una forma de ser que marque referencia del modelo de Jesús. Segundo, que sea una solidaridad acogedora como actitud permanente. Tercero, una solidaridad organizada y eficaz. El cuarto, y que da sentido a los anteriores, que sea una solidaridad orante y evangelizadora”.
Por su parte, Mons. Ignacio enfatizó que esta primera Carta Pastoral surge a la luz de su recorrido en los dos años de ministerio episcopal: “Han sido dos años de mirar la diócesis y sobre la base de esa observación, en general de la sociedad en la cual la Iglesia valdiviana está asentada, uno ve que hay muchos desafíos en esta dimensión tan propia de la Iglesia que es la solidaridad. A la luz de esa mirada donde uno percibe el mundo tan desarrollado y tan desproporcionado a la vez; donde crece la brecha entre ricos y pobres, ello se transforma en una herida que uno va descubriendo como propia y surge la necesidad de ayudar a crear mayor conciencia para acortar esa brecha, en un trabajo mancomunado de todos los agentes sociales y donde la Iglesia se incluye dentro de ellos”, puntualizó.
Centrada en la vivencia de la solidaridad e inspirada en el texto del Buen Samaritano, la carta de 60 páginas, está dividida en 109 números con una Introducción y tres capítulos. El primero, la Solidaridad viene de Dios; el segundo, en el camino del Buen Samaritano y el tercero, una Iglesia Solidaria; además de la conclusión; con las respectivas preguntas de trabajo personal y grupal, que serán reflexionadas en las diversas comunidades cristianas, familias, colegios, movimientos apostólicos, parroquias, etc., durante la celebración del tradicional Mes de María, donde los fieles reflexionarán la Carta y buscarán la forma de concretar el contenido en sus respectivos entornos.
Convocados por el Dios Solidario
Por la tarde, la Carta fue entregada por Mons. Ignacio a los fieles en una Solemne Eucaristía enmarcada en la Fiesta Patronal de la Diócesis, Nuestra Señora del Rosario.
Durante la homilía, Mons. Ducasse destacó, citando al Papa Juan Pablo II que “la solidaridad es la determinación firme y perseverante de empeñarnos en el bien común” e instó a los fieles a no ser espectadores de los dramas humanos que nos rodean y a trabajar creativamente como Iglesia y como sociedad, como lo expresa en el Nº 107 de su Carta: “Nos hace bien, y lo necesitamos, reflexionar sobre esta Buena Noticia de la Solidaridad y buscar no sólo la realización de gestos solidarios –que nunca estarán de más-, sino, sobre todo, cómo educarnos y desarrollar actitudes solidarias permanentes entre nosotros y con todas las personas, nuestros prójimos, cómo hacer de nuestra vida una práctica permanente en la justicia y preocupación primera por los más pobres”.
Fuente: Comunicaciones Valdivia