El capellán de los migrantes el sacerdote Del Mar Silva, colombiano misionero Escalabriniano, señaló que de las colonias que ellos acogen en la parroquia St. Brigide, los chilenos siempre destacan “Son muy solidarios, comparten su fe con fervor, pero sobre todo sus tradiciones. Sus fiestas patrias en Septiembre, Navidad y la Virgen del Carmen son siempre grandes eventos que ellos abren a los otros hispanos, es maravillosa la comunidad que conforman y lo que proyectan a los demás”.

Entre quienes son parte de los grupos católicos chilenos también hay familias que hicieron de la gastronomía su fuente laboral y al parecer, fue una muy buena elección. Los Padilla Faúndez se dedicaron a la pastelería y aunque le pusieron por nombre Harley´s Backery a su negocio, al dibujar a condorito en su entrada asumieron ser reconocidos por el nombre de nuestra típica caricatura.

Humilde Faúndez, salió junto a su marido por razones políticas y añora nuestro país, en su local abundan las marraquetas, los chilenitos, las palmeras y las ricas empanadas. Por eso cuando empezó la organización de la Jornada Mundial ella se inscribió para recibir peregrinos, una experiencia, que dice, le marcará la vida “que hayan llegado ellos me emociona, siento muchas cosas, es lindo…yo siempre voy a ser chilena, siempre se echa de menos la patria, a mí me habría gustado quedarme en Chile pero las circunstancias fueron así y mis hijos nacieron y crecieron acá”.

Por su parte, la señora Clotilde Vergara y su marido, dueños de “Bohemia restaurant” cocinan 100% made in Chile, porotos con rienda y cazuelas se venden en medio de fotos de Valparaíso, el Quisco, huasos bailando cueca, y reportajes de medios de comunicación australianos que hablan de las maravillas culinarias del local. En su hogar, osorninas han encontrado su segunda casa, “es como recibir un pedacito más de Chile, yo no conozco su ciudad pero ellas nos cuentan de sus tradiciones y estamos felices al escucharlas. Siempre que un compatriota llegue hasta acá lo ayudaremos, será bienvenido, más en esta oportunidad donde esta juventud a hecho tanto esfuerzo”.

En ambos locales abundan los clientes, y ellos consignan que no sólo cocinan exquisito sino que son cariñosos, alegres y muy acogedores, por eso vuelven una y otra vez. La imagen de los chilenos en el austral continente es de gente responsable, trabajadora, profesional y honesta, cosa que no siempre sucede en otras partes del mundo y que permite a los peregrinos chilenos ser aún mejor recibidos.

Fuente: Comunicaciones Vicaría de la Esperanza Joven