En su saludo a miles de peregrinos reunidos en el patio de la residencia pontificia de Castel Gandolfo con motivo del Ángelus, el Santo Padre quiso garantizar a todos los damnificados que «la Iglesia está con vosotros».
«En estos días, nuestro pensamiento y nuestra oración se dirigen constantemente a las poblaciones de Perú, golpeadas por un terremoto devastador», comenzó diciendo.
«Invoco para los numerosos difuntos la paz del Señor, para los heridos la pronta curación, y para quienes se encuentran en condiciones difíciles les aseguro: la Iglesia está con vosotros, con toda su solidaridad espiritual y material», añadió.
«Mi secretario de Estado, el cardenal Tarcisio Bertone, que desde hace tiempo tenía programada una visita a Perú, en los próximos días testimoniará personalmente mis sentimientos y llevará la ayuda concreta de la Santa Sede», explicó el obispo de Roma.
Hablando después en español, el Papa dijo después: «Con constante preocupación y gran afecto me siento muy cercano a tantos hermanos y hermanas tan duramente probados».
«Encomiendo al Señor a las numerosas víctimas y heridos, así como a los que han perdido su vivienda y sus bienes», aseguró.
«Que la intercesión de la Virgen María despierte en todos sentimientos de caridad y solidaridad fraterna que permitan aliviar su difícil situación. A todos os imparto de corazón mi Bendición Apostólica», concluyó.
Los fallecidos por el violento terremoto que asoló el miércoles la costa de Perú son, hasta el momento, 496 y los heridos 1.042, según cifras oficiales del Instituto Nacional de Defensa Civil (INDECI).
Datos extraoficiales de los bomberos señalan que son 510 los fallecidos, 1.500 heridos y unos 80.000 damnificados.
Fuente: www.zenit.org