El martes 26 de agosto, en el auditorio de Duoc UC Sede Valparaíso, Caritas Valparaíso realizó su primera Cuenta Pública. Durante el evento, se dieron a conocer los resultados de los proyectos del Plan de Respuesta Humanitaria 2024-2025, la Reducción del Riesgo de Incendios Forestales 2023-2024 y los Proyectos Fondos de Cuaresma 2025, junto a la información financiera que permitió su realización.

Amplia Convocatoria
El encuentro fue encabezado por el director de Caritas Valparaíso, Leonardo Córdova, y el Obispo Auxiliar de Valparaíso, Monseñor Mario Salas, junto al director ejecutivo de Caritas Chile, Lorenzo Figueroa. Asistieron también representantes de diversas instituciones y organizaciones, como SENAPRED, CONAF, el Departamento de Gestión de Riesgos de Emergencia y Desastres de las I. Municipalidades de Quilpué y de Villa Alemana, la Corporación La Matriz, la Agrupación Canal Chacao, el Templo Evangélico Pentecostal Vitacura de Quilpué, el Instituto Nacional de Derechos Humanos de la Región de Valparaíso y la PUCV.

Transparencia para construir confianza y solidaridad
"Frente a una sociedad fragmentada y en la que la desconfianza es creciente, queremos oponer el rendir cuentas y la transparencia de lo que hacemos como una práctica virtuosa", expresó el director de Caritas Valparaíso, Leonardo Córdova. Posteriormente, complementó: “Caritas siempre realiza rendición de cuentas a sus donantes, pero consideramos que es necesario realizar también esta Cuenta Pública para que la comunidad y las distintas instancias de la sociedad civil conozcan lo que hacemos y el destino de los fondos que gestionamos, porque lo que hacemos es muy relevante".

En la misma línea, el Director Ejecutivo de Caritas Chile, Lorenzo Figueroa, destacó la importancia de la iniciativa de Caritas Valparaíso como una práctica que aporta a la reconstrucción de una convivencia solidaria en el país, especialmente en un contexto de debilitamiento de los lazos sociales e individualismo y, como ha mostrado el último informe del PNUD, de una creciente desconfianza, pesimismo y resistencia a participar en organizaciones.

Figueroa también hizo referencia a una sociedad donde las personas viven en mayor soledad, como lo señala el CENSO del año 2024, que registra que casi un 22% de los hogares en Chile son unipersonales, y agregó que "sabemos que soledad es sinónimo de vulnerabilidad".

Asimismo, el director ejecutivo de Caritas Chile destacó el sentido más auténtico de la solidaridad como una relación de reciprocidad entre personas de igual dignidad que contribuyen al bienestar de todos. En su intervención también subrayó la importancia de formar para la empatía y la solidaridad, como lo hacen algunas sociedades europeas, donde niños y jóvenes reciben una formación sistemática explícitamente orientada al desarrollo de la empatía y la solidaridad en sus procesos académicos.

Finalmente, destacó que, a partir de las enseñanzas de Laudato Sí, impulsar la solidaridad hoy significa promover el cuidado tanto de la comunidad como de sus ecosistemas amenazados, de la "casa común". Por último, valoró el trabajo de Caritas Valparaíso, porque la solidaridad también implica realizar un trabajo social de calidad y hacerlo con transparencia, es decir, de acuerdo a estándares de calidad y rindiendo cuentas de esta labor, tal como está ocurriendo hoy.

La solidaridad: acción que transforma
En la ocasión, Córdova presentó el trabajo realizado junto a las comunidades de Valparaíso y destacó la importancia de las colaboraciones con organismos del Estado, con organizaciones de la sociedad civil y con otras confesiones religiosas en la búsqueda del bien común y la solidaridad.

En concreto, y respecto a las cifras de impacto del trabajo de Caritas Valparaíso, señaló: “Cuando hablamos de un año 2024 en que se llegó a 6.600 personas con más de 900 millones de pesos en ayuda entregada, es necesario dar cuenta. La transparencia nos obliga a poder dar cuenta de todos los recursos que recibimos. Esto tiene dos efectos: primero, dar cuenta de lo realizado, y segundo, que la gente vaya recuperando la confianza, especialmente en las instituciones como la Iglesia, donde estamos trabajando con mucho celo para cumplir la voluntad de los donantes, para cumplir con la entrega de absolutamente todos los recursos que recibimos. Por lo tanto, es un ejercicio necesario y virtuoso”.

Plan de Respuesta Humanitaria 2024-2025
El plan consistió en la ejecución de cinco proyectos financiados por USAID-CRS EMPOWER, USAID/BHA, Caritas Alemania, la Fundación de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (LDSC) y una campaña nacional e internacional de Caritas Chile. En total, se recibieron $920.400 dólares, los cuales fueron destinados a 1.959 familias, abarcando a 6.604 personas.

Esta ayuda fue entregada a través de transferencias bancarias, tarjetas de alimentos (gift card), vales de recargas completas de gas y apoyo psicosocial por medio de talleres para proteger y cuidar la salud mental y potenciar los recursos emocionales afectados por la catástrofe. También se brindó ayuda en medios de vida mediante la entrega de insumos y herramientas, y se proporcionaron implementos a tres ollas comunes.

Estos proyectos fueron ejecutados en las comunas de Viña del Mar, Quilpué y Villa Alemana. En la primera, se trabajó con vecinos de Villa Independencia, Lomas Latorre, Manuel Bustos, Los Almendros, El Olivar y Villa Dulce. Mientras que en la Ciudad del Sol, estos proyectos se implementaron en Población Argentina, Población Valencia, Pompeya Norte y Pompeya Sur. Finalmente, en Villa Alemana se trabajó con vecinos de Quebrada Escobares y El Patagual.

Proyectos para la Reducción del Riesgo de Incendios de Interfaz 2024-2025
El objetivo principal de estos proyectos es que los mismos vecinos sean los protagonistas de la prevención en sus comunidades. Para ello, se trabaja en la conformación de un comité comunitario, se promueve su capacitación, se propicia el establecimiento de vínculos con los organismos locales (municipio, bomberos, CONAF, SENAPRED) y la organización de simulacros de evacuación. También, se trabaja en la realización de un plan de emergencia y se les hace entrega de kits de emergencia.

El proyecto contempla cinco etapas: la primera es la focalización de la comunidad vulnerable. La segunda corresponde a la conformación del Comité Comunitario para la Reducción del Riesgo de Incendios y la obtención de la Personalidad Jurídica. Luego, la tercera etapa alude a la capacitación y evaluación participativa del riesgo de incendios de interfaz urbano forestal. La cuarta etapa refiere a la planificación comunitaria para la reducción del riesgo de incendios, que incluye el desarrollo de un Plan Comunitario de Prevención y un Plan de Emergencia y Evacuación. Por último, la quinta etapa corresponde a la implementación de acciones locales de reducción del riesgo de incendios, que abarca la entrega de un Kit de herramientas de prevención y el desarrollo de un proyecto de inversión comunitaria.

En total, fueron tres los proyectos desarrollados, de los cuales solo dos fueron ejecutados. El primero fue "Gestión Territorial y participativa de la Reducción del Riesgo de Incendios Forestales en la interfaz urbano Forestal en Chile – Parte I (2023 – 2024)", que fue financiado por USAID y finalizó el año pasado. El segundo proyecto, "Gestión Territorial y participativa de la Reducción del Riesgo de Incendios Forestales en la interfaz urbano Forestal en Chile – Parte II", también financiado por USAID, fue cancelado debido a políticas del gobierno norteamericano. Finalmente, el tercer proyecto es "Comunidades Resilientes a los Incendios Forestales", que es financiado por el Centro para la Filantropía en Desastres (CDP) y actualmente se encuentra en ejecución.

Las 13 comunidades beneficiarias de estos proyectos corresponden a Fonasa 5 y Peñuelas (Valparaíso); Villa Cumbres, Forestal Bajo, Villa Dulce Alto y Villa Dulce Bajo (Viña del Mar); Canal Chacao, Los Boldos Quilpué y Población Argentina (Quilpué) y, por último, Población Wilson, Población Profesores, Quebrada Escobares y El Patagual – Lo Hidalgo (Villa Alemana).

Proyectos Fondos de Cuaresma 2025
Gracias al Fondo Nacional de Cuaresma de Fraternidad 2025, se están ejecutando dos proyectos en la Diócesis de Valparaíso. El primero, “Nuevo Camino, Nueva Vida. Enfoque integral en la promoción de la reinserción en familias de Valparaíso”, brinda apoyo a mujeres privadas de libertad que están prontas a salir, a través de ayudas para que puedan generar sus propios emprendimientos y medios de vida. Asimismo, se les entrega contención y apoyo psicoemocional a sus familias. El segundo proyecto es “Acompañar-te en el rol del Cuidado. Apoyo integral a familias cuidadoras”, que va en ayuda de los cuidadores de personas en situación de discapacidad.

Además, en forma paralela, se está ejecutando el proyecto “Re-Conociéndonos desde la Resiliencia. Salud mental y apoyo psicosocial en comunidad”, que tiene por objetivo entregar herramientas en torno a la prevención de incendios desde una mirada socioemocional, a través de talleres que se desarrollan en parroquias y establecimientos educacionales de Valparaíso, Curauma y Placilla. El proyecto es financiado mediante la adjudicación del Fondo Diocesano de Acción Solidaria 2025.

Finalmente, 16 proyectos están siendo ejecutados gracias a la adjudicación de Fondos Diocesanos de Cuaresma de Fraternidad 2025, que corresponden a fondos de $1.500.000 por proyecto, y que van en beneficio de vecinos y comunidades de Limache, Quillota, Valparaíso, Villa Alemana y Viña del Mar. Las temáticas de las iniciativas van desde apoyo a comedores solidarios, un taller de peluquería y coloración, un taller de corte y confección, apoyo integral a mujeres en situación de vulnerabilidad, habitabilidad de una casa de acogida, apoyo a pastoral carcelaria y a personas privadas de libertad y sus familias, apoyo a la Pastoral diocesana del Adulto Mayor y mejora de la estructura de una residencia pastoral que ayuda a personas con consumo problemático de sustancias.

Fuente: Caritas Chile

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