Monseñor Ricardo Ezzati trabaja arduamente en la redacción del documento que orientará el caminar de la Iglesia Latinoamericana en los próximos años. Si bien su aporte tiene hoy una relevancia continental, su mirada no se aleja del pueblo chileno al cual sirve como pastor y, precisamente, por ello visualiza los aspectos del documento que serán relevantes para la misión evangelizadora chilena.
Para el Arzobispo de Concepción, la Iglesia chilena tiene que hacer un examen de conciencia sereno y profundo para evaluar si verdaderamente sus espacios institucionales y sus proyectos pastorales son las mediaciones adecuadas, en el contexto actual, para que las personas puedan encontrar a Jesús.
Precisamente, este encuentro, personal y comunitario, enfatiza monseñor Ezzati, es el que puede avivar la fe de los cristianos.
A partir de esta tarea, el Arzobispo de Concepción visualiza dos grandes desafíos para la Iglesia chilena: llegar a los más alejados e inculturar el Evangelio en el Chile de hoy.
Entre los alejados, monseñor Ezzati, no sólo menciona a aquellos distanciados por la perspectiva geográfica, sino que se refiere, sobre todo, a las nuevas periferias como el mundo obrero, de la cultura, del arte, de la ciencia, de la economía, de la política y la educación.
El segundo gran desafío planteado por el pastor apunta a que no sólo se identifiquen los grandes campos de transformación social y cultural, sino que la Iglesia penetre en ellos “para que, desde adentro, la semilla del Evangelio vaya floreciendo en nuevas formas de vivir, por ejemplo, la solidaridad, la concepción de la propia persona, la visión que tenemos de los bienes de la tierra, la manera como nos organizamos”.
Monseñor Ezzati enfatiza que, precisamente, “eso es inculturar el Evangelio: hacer que el Evangelio penetre en la cultura de tal manera que llegue a ser expresado en instituciones que son laicas”.
En ambos desafíos la figura del laico, según expresa el Arzobispo de Concepción, alcanza una gran relevancia. “La misión fundamental del laico, su especificidad, es ser testigo de Jesucristo y misionero en las estructuras del mundo. Por consiguiente ser un laico que haya logrado una profunda identidad y que sepa expresar en lenguaje “laico” lo que son los valores del Evangelio”, añade.
Monseñor Ezzati pidió seguir rezando por la V Conferencia y envió un cariñoso saludo a los fieles de la Arquidiócesis de Concepción.
La entrevista íntegra a monseñor Ricardo Ezzati está disponible en:
http://www.radiomaria.cl/adn_not_5.php?id=45&t=s
Fuente: Prensa Radio María