Crucemos a la otra orilla: En Valparaíso se realizó el XIV campamento de inclusión con personas con discapacidad
En la casa de retiros Buen Pastor, ubicada en el sector de Playa Ancha, Valparaíso, se realizó la 14° versión del Campamento de inclusión para personas en situación de discapacidad, organizado por el Área Eclesial de la Conferencia Episcopal, instancia que tuvo por objetivo propiciar la formación para agentes pastorales que desean potenciar una pastoral que camina hacia la inclusión de las personas en situación de discapacidad.
El encuentro se centró en la necesidad de avanzar en un proceso que, desde las bases de las comunidades eclesiales, avance en la visibilización y la sensibilización acerca de las personas con discapacidad dentro de las distintas estructuras pastorales y de cómo la Iglesia debe ser un espacio que puedan considerar su casa. Para ello, además de talleres que entregaron elementos sobre igualdad, dignidad e inclusión, así como profundizar en los tipos de discapacidades y sus características, se abordaron los temas de derechos sexuales y reproductivos de las personas con discapacidad, el acompañamiento espiritual y herramientas para la narrativa oral.
Un aspecto relevante este año fue la convocatoria, la cual en años anteriores estaba dirigida principalmente a catequistas, en esta oportunidad se amplió a agentes pastorales en general, participando así personas de pastoral juvenil, pastoral social, educación, liturgia, etc.
Tras la eucaristía celebrada por el obispo de Punta Arenas, Óscar Blanco, quien acompaña al equipo a cargo de la organización, la jornada finalizó con un envío misionero a los participantes, para que sean reales “agentes de inclusión” en sus diócesis y comunidades, en pos de animar en sus respectivos contextos la necesidad de avanzar hacia una Iglesia sinodal e inclusiva.
Sabemos que aún queda mucho por hacer para superar prejuicios y discriminaciones
Otro elemento que se destacó en la jornada fue el vínculo que se ha generado con el Dicasterio para laicos, familia y vida del Vaticano, donde se participó durante 2022 en la elaboración del documento
«La Iglesia es nuestra casa», como aporte a la Secretaría general del Sínodo en Roma. Fruto de esto, el encargado de la Pastoral de las Personas con Discapacidad del Dicasterio,
Vittorio Scelzo, envió un video con un saludo a los participantes del campamento.
En el mensaje el representante de la Santa Sede destacó: “Normalmente a la discapacidad se asocia la idea de la necesidad, de la asistencia y a veces -gracias a Dios cada vez menos- de un cierto pietismo. No, el Papa no os mira así, la Iglesia no os mira así. El punto de vista de los cristianos sobre la discapacidad ya no es, ni debe ser el pietismo y el mero asistencialismo; sino la conciencia de que la fragilidad asumida con responsabilidad y solidaridad es un recurso para todo el cuerpo social y para la comunidad eclesial. Esta nueva mirada a la que nos invita el papa, inclusiva, es la otra orilla hacia la que estamos llamados a conducir nuestras comunidades”.
Además, Scelzo agregó: “Conocemos bien el deseo de nuestras hermanas y hermanos con discapacidad de que se les tome en serio y apreciamos los dones con los que se enriquecen nuestras parroquias y asociaciones, pero también sabemos que aún queda mucho por hacer para superar prejuicios y discriminaciones. Y para que todos puedan decir con naturalidad la «la Iglesia es nuestra casa». El Dicasterio para los laicos, la familia y la vida, acoge el trabajo que están realizando y les invita a continuarlo con pasión. Nosotros en la medida de nuestras posibilidades intentaremos acompañarlos con espíritu sinodal. Como saben el texto de la síntesis, «la Iglesia es nuestra casa» y algunos videos que relatan su génesis, así como algunos
contenidos fundamentales han sido publicados en nuestra página web y están a su disposición. Confiando en que el diálogo de estos días dará abundantes frutos para la Iglesia en Chile y en particular para sus hijos con discapacidad, les deseo un buen trabajo”.
Fuente: Área Eclesial CECh