Con una masiva asistencia de fieles se celebró la misa de Jueves Santo, presidida por Monseñor Pablo Lizama, Arzobispo de Antofagasta, en un día que es particularmente especial ya que, además de culminar la Cuaresma, nos introducimos en los tres días más importantes del año litúrgico, en lo que llamamos el Triduo Pascual.

En esta noche, se celebró la Eucaristía que viene a evocar la Última Cena en la cual Jesucristo, en medio de la comida Pascual, ofreció a Dios Padre su Cuerpo y su Sangre bajo las especies del pan y el vino.

Una familia de la parroquia San José- Catedral que participa activamente en la catequesis hace la presentación de las ofrendas.

Al mismo tiempo, Jesús se muestra servidor de los hombres a través del hermoso signo del lavado de los pies. Un signo profundo y sencillo que, hoy, me parece conveniente mantener como una actitud de servicio y entrega a los demás. En esta línea, también se destacan otros gestos importantes como la presentación de los dones, la ayuda fraterna, el gesto de paz, la solidaridad con los más pobres, entre otros.

En su Homilía Monseñor Pablo Lizama, llamó a la comunidad a imitar y hacer suyos estos gestos y preguntarse cuántas veces como Cristo nos hemos ceñido la toalla a la cintura, para servir a nuestros hermanos.

Así mismo destacó el inmenso amor que siente Dios por el hombre señalando: “esta es la pasión del amor de Dios por el hombre, que le entrega la Eucaristía, le entrega el sacerdocio; para que pueda confeccionar esa Eucaristía; pero esta Eucaristía y este sacerdocio no son en sí mismo, no son para estar aquí nosotros felices de haber comulgado y esto termina a la salida del templo; esto lleva consigo una consecuencia, la consecuencia del amor. Es el día de la caridad, de preocuparnos más de los otros, de sentir que estoy haciendo yo por mis hermanos y Jesucristo no lo dice en palabras, sino lo dice con un gesto que en un momento más delante de estos hermanos queridos hermanos diáconos y ministros vamos a repetir, que es el lavado de los pies”.

Fuente: Pastoral de Comunicaciones
Arzobispado de Antofagasta
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