Los diputados Luciano Cruz Coke y Diego Schalper acogieron la propuesta de un grupo de organizaciones civiles y religiosas que cada año coordinan la celebración del Mes de la Solidaridad en agosto.

Desde 1993 este mes es ocasión de una serie de actividades sociales de parte fundaciones, Ongs, colegios e institutos de educación superior, confesionales y laicos, ya que fue ese año cuando el Congreso chileno consagró el día 18 de agosto como el “Día de la Solidaridad” para honrar la vida y obra de Alberto Hurtado, santo chileno y Padre de la Patria, quien luchó por sensibilizar a los chilenos ante la pobreza y desigualdad.

Dentro de los ritos que se celebran en forma initerrumpida desde 1993 figura la visita del Presidente de la República en ejercicio a la tumba de Alberto Hurtado, como una forma de reconocer y rendir homenaje al hombre que hizo de la solidaridad y la lucha por la justicia social el centro de su vida. También año a año se realiza una multitudinaria caminata de jóvenes, hasta el “Santuario” del Padre Hurtado, que cada año reúne a más de 15 mil jóvenes.

La gratitud es el corazón de la solidaridad

Pero la solidaridad va más allá de la lucha contra la pobreza, desigualdad y nuevas formas de exclusión. La experiencia de muchos países desarrollados está demostrando que a pesar de los poderosos y eficientes estados de bienestar existe un problema humano que no se arregla con recursos económicos sino con gestos solidarios: la soledad. Combatir ese flagelo implica reconocer que la conexión, los vínculos, el sentido de pertenencia, son esenciales para la felicidad y bienestar de los demás.

Con la convicción de que la gratitud es el corazón de la solidaridad, una serie de organizaciones civiles y religiosas encabezadas por Fundación Padre Hurtado, solicitó a los diputados Schalper y Cruz Coke acoger el proyecto que declare cada 1º de agosto, día de inicio del Mes de la Solidaridad, como “Día de la Gratitud en Chile”.

“Buscamos dar gracias a quienes dan a través de voluntariados en Chile, pero también a quienes dan a través de sus trabajos, de su entrega a la familia, de su ejemplo formador a las nuevas generaciones, porque si ellos al dar demuestran que conciben la sociedad como un colectivo que lucha por las necesidades de todos, estamos construyendo un país mejor”, señala María Paz Vega, directora ejecutiva de Fundación Padre Hurtado.

Agrega: “Pero también queremos invitar a celebrar este día y a dar gracias a todos los voluntarios de Chile, a los servidores públicos, de los profesores, artistas, padres y madres de familia, que comprueban que a través del dar sale lo mejor de uno mismo. Es un día para celebrar, como ocurre en aquellos países que tienen su fiesta de Acción de Gracias”.

“Esperamos que este proyecto de ley que consagra el 1º de agosto de cada año como Día de la Gratitud permita que quienes vivimos en esta tierra nos demos unos a otros las gracias. Eso nos conecta, crea vínculos y comunidad, y nos permite pensarnos sin individualismos para el futuro”, señala la directora ejecutiva de Fundación Padre Hurtado.

El proyecto de ley presentado ayer señala en su artículo único: “Institúyese el día 1 de agosto de cada año como el “Día de la Gratitud”, marcando el inicio del Mes de la Solidaridad. En ese día se fomentarán en todo el país aquellas actividades destinadas a dar las gracias por lo que se tiene y a sensibilizar respecto a la importancia de la solidaridad”.

Fuente: Fundación Padre Alberto Hurtado