En la ceremonia participaron Bomberos, PDI, Carabineros, servidores de las Obras Fraternas, como los Comedores Solidarios y grupos de Voluntariado entre ellos las Damas de Rojo, Damas de Amarillo, Asilos de Ancianos, delegaciones de Colegios Católicos y Municipalizados.
En su Homilía el Obispo destaco el legado de San Alberto Hurtado y su magnífica obra, resaltando también el trabajo que cada uno de los voluntarios y voluntarias desarrollan en bien de sus hermanos más desposeídos, “la tarea que ustedes desarrollan en el silencio de su servicio, hace tanto bien a los hermanos, y nos enorgullece verles trabajar, cada uno de ustedes nos da un tremendo ejemplo de fraternidad día a día. Gracias por todo el bien que hacen y por preocuparse de que todos tengan un plato de comida caliente y un lugar digno donde estar”.
Antes de la Bendición final y como acción de gracias, se entregó un reconocimiento a quienes de diversas formas colaboran con las diferentes obras solidarias en la Diócesis de Linares, destacando a las voluntarias y voluntarios que cocinan y sirven las colaciones, a las Panaderías que cada día aportan el pan a los comedores solidarios, a las invitadas especiales de Red de Alimentos y a los transportistas que traen los aportes que esta fundación comparte solidariamente, así como también se reconoció especialmente a los jóvenes que durante los incendios del verano recién pasados dijeron presente y acudieron con sus manos, su fuerza y cariño para ayudar en la emergencia.
Fuente: Comunicaciones Linares