Amar al Papa significa difundir el fuego del amor, la solidaridad y la misericordia
Esta colecta conocida como el “Óbolo de San Pedro” es una ayuda económica que los creyentes católicos ofrecen todos los años al Santo Padre, como expresión de apoyo a la solicitud del Papa por las múltiples necesidades de la Iglesia universal y las obras de caridad en favor de los más necesitados. Con estas donaciones, la Iglesia Católica colabora con el sostenimiento de comedores, escuelas, centros para niños huérfanos, hospitales, casas de reposo para ancianos, entre otras obras de ayuda social, como aquellos que sufren las consecuencias de las guerras, desastres naturales, entre otros.
Durante la conferencia de prensa en la que el nuncio dio a conocer la jornada,
monseñor Ivo Scapolo explicó del origen de esta práctica: “La fiesta de San Pedro y San Pablo es una ocasión para rezar por el Papa. Ustedes saben que casi todas las veces que el Papa dirige un saludo, especialmente cuando reza la oración del Ángelus, el Santo Padre siempre se dirige a los peregrinos y les dice: “no se olviden de rezar por mí”, agregando: “Todos los católicos son llamados a sentirse particularmente cercanos al Papa Francisco. Rezar por su salud y para que el Señor le conceda todas las gracias, ayudas, bendiciones, sabiduría y el amor que necesita para cumplir su importante misión de ser vicario de Cristo y sucesor de Pedro”.
Respecto al
objetivo de los fondos que se recaudan en esta colecta, que en 2015 alcanzaron los $100 millones en Chile, el representante del papa manifestó: “
Ayudar a aquellas comunidades cristianas que viven en una particular dificultad o pobreza, y también aquellos que en diferentes lugares del mundo, sin mirar creencias religiosas,
están viviendo el sufrimiento a causa de la guerra, las catástrofes naturales, la pobreza o la injusticia en la que pueden encontrarse”.
Por ello el nuncio invitó a todos los católicos en signo de amor y unidad con el papa a “Dar lo que puedan, en espíritu de comunión, solidaridad y servicio. El papa ha invitado a todos, cristianos y personas de buena voluntad, a sentirse cercanos con quienes son discriminados.
El Santo Padre ha denunciado la globalización de la indiferencia. El papa nos invita a la globalización de la solidaridad. Esta es una oportunidad para ayudar con un signo material, a través del cual el papa puede realizar obras de caridad a los más necesitados”.
Difundir el fuego del amor y la solidaridad en Chile
Tras los aluviones que afectaron el año 2015 al norte de Chile, especialmente a localidades de Atacama,
la solidaridad del Papa Francisco se manifestó con ayuda económica que la Delegación Nacional del Óbolo de San Pedro hizo llegar a la región.
Por ello monseñor Scapolo explicó: “Rezar por el papa, sentirse en comunión con él, significa también en Chile preguntarse cada uno en su sector, su comunidad, parroquia o barrio,
que yo puedo hacer concretamente para dar respuestas concretas y eficaces a la situación de sufrimiento de nuestros hermanos”.
“
Amar al papa, sentirse en comunión con él,
significa también difundir el fuego del amor, de la solidaridad, de la misericordia, donde cada uno de nosotros está viviendo y trabajando”, destacó el prelado.
Finalmente, el representante vaticano invitó a la celebración que se realizará este
miércoles 29 de junio a las 17 horas en la Catedral Metropolitana, en donde
el nuncio junto al Arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, celebrarán la Fiesta de San Pedro y San Pablo junto a miembros de las parroquias y comunidades católicas de la capital.
Fuente: Comunicaciones Santiago
www.iglesiadesantiago.cl