Colonias Urbanas de verano: Alegría para miles de niños de Santiago
Adolescentes que deben trabajar y niños que no tienen oportunidad de salir de vacaciones fuera de Santiago, viven momentos de descanso y diversión gracias a las Colonias Urbanas y al programa Niños Trabajadores de la Vicaría de Pastoral Social Caritas. En Chile existen 229 mil niñas, niños y adolescentes que están ocupados o que trabajan.
Por Francisco Morón
“Me gusta venir a jugar a las colonias. Dibujamos, jugamos a la pinta y corremos. En mi casa me pegan. Mire tío esta cicatriz. Aquí me olvido de todo y soy feliz”. Así es el día a día de Diego, de tan sólo cinco años. Desde los tres participa de las colonias de la parroquia María Misionera de Maipú.
Sus padres viven en situación de calle y la tuición temporal de él y sus dos hermanos menores, está ahora en manos de su abuela. Niños y niñas de los sectores más vulnerables de Santiago, donde la droga y violencia familiar están presentes en la cotidianidad, son los protagonistas de las Colonias Urbanas. Iniciativa que tuvo origen en la Vicaría de la Solidaridad, impulsada por el Cardenal Raúl Silva Henríquez en la década de los 70, que busca ser una instancia de recreación e inclusión social.
Así como Diego, hay más de 10 mil niños con los que trabaja este programa. “Este año las Colonias cumplieron 37 años al alero de la vicaría. Son organizaciones juveniles que prestan servicios a los niños principalmente. Nosotros lo que hacemos es agruparlos y generar organización comunitaria, traspasar los valores del evangelio, formación y acompañamiento. Trabajamos en las cinco zonas de la arquidiócesis atendiendo a más de 10 mil niños y con cerca de 2 mil monitores”, relata la encargada arquidiocesana de las Colonias Urbanas, Yolanda Urbina, quien además fue una “niña colona”. “Mi experiencia en las colonias fue lo que me guiñó en mi vocación de servicio”.
Semanalmente y durante todo el año, un grupo de jóvenes, principalmente niños y niñas, se reúnen en sus respectivos barrios a reflexionar en torno a las diversas problemáticas que afectan el entorno donde viven. Forman equipos de trabajo, haciendo énfasis en crear espacios permanentes de formación, contando con el apoyo de la comunidad para la preparación y realización de diversas actividades recreativas y educativas que son guiadas por voluntarios, muchos de ellos adolescentes que cuando eran niños vivieron en carne propia lo que era participar de las colonias. El trabajo más intenso es en las vacaciones de invierno y verano.
Niños, Niñas y adolescentes trabajadores (NNats)
Al igual que en las colonias, pero enfocado en adolescentes que desde niños deben trabajar, el programa NNATS busca acompañar de una manera recreativa a los que sufren esta realidad.
Bryan Rodríguez de 15 años participa del programa. Gracias a la ayuda que ha recibido, ha logrado continuar sus estudios a pesar de ayudar a sus padres, que son comerciantes. “Desde los diez años que trabajo, no lo hago porque mi familia me obligue, si no por ayudarlos. Al principio era complicado, sobre todo cuando me invitaban a jugar, pero ahora me gusta trabajar. Aquí me han enseñado a valorarme, he recuperado el tiempo que he perdido producto del trabajo”.
Si bien en los últimos años ha existido un avance en cuanto a la erradicación del trabajo infantil, en la actualidad y según datos de la Encuesta de Actividades Económicas de Niños, Niñas y Adolescentes (EANNA, 2012), en Chile existen 229 mil niñas, niños y adolescentes que están “ocupados” o que trabajan.
La situación de Bryan, y de muchos niños más, es la que busca trabajar esta iniciativa, que desde 1996 y al alero de la Vicaría de Pastoral Social, ha acompañado a unos 10.500 niños y niñas, en alianza con la Fundación Telefónica y la Fundación ANIDE - KNH.
El campamento de verano
“Durante el 2015 el programa acompañó a 550 niños y adolescentes. Sin estigmatizarlos por trabajar, sin perseguirlos a ellos o a sus familias, la vicaría los acoge y acompaña en su situación. Les orienta y motiva a seguir estudiando, a reducir sus horas de trabajo y los vincula con otros niños y niñas trabajadores con quienes comparten experiencias y aprenden de sus derechos”, relata la encargada arquidiocesana del programa, Mónica Ruiz.
Desde el año 2014 se ha decidido dar un paso más adelante, realizando un campamento para niños/as y adolescentes trabajadores prioritarios. El objetivo es crear un espacio de recreación, educación y prevención por tres días, que contribuya a la reducción progresiva de sus horas de trabajo en el periodo vacacional.
Ambos programas, Colonias Urbanas y NNATS, llevarán a cabo, durante este mes, actividades que son fundamentales para el desarrollo de sus estrategias de intervención. Las 76 colonias que funcionan en la Arquidiócesis de Santiago, incrementan su trabajo con los niños y niñas vulnerables durante el período de vacaciones. Por otro lado, NNATS llevará a cabo el campamento de verano que contará con la participación de 80 adolescentes durante tres días en la casa de retiro La Isla de Colina
¿Quieres participar de estos programas?
Teléfono: 27900600 Correo: vicaria@vicaria.cl
Fuente: Comunicaciones Santiago
www.iglesiadesantiago.cl
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Sus padres viven en situación de calle y la tuición temporal de él y sus dos hermanos menores, está ahora en manos de su abuela. Niños y niñas de los sectores más vulnerables de Santiago, donde la droga y violencia familiar están presentes en la cotidianidad, son los protagonistas de las Colonias Urbanas. Iniciativa que tuvo origen en la Vicaría de la Solidaridad, impulsada por el Cardenal Raúl Silva Henríquez en la década de los 70, que busca ser una instancia de recreación e inclusión social.
Así como Diego, hay más de 10 mil niños con los que trabaja este programa. “Este año las Colonias cumplieron 37 años al alero de la vicaría. Son organizaciones juveniles que prestan servicios a los niños principalmente. Nosotros lo que hacemos es agruparlos y generar organización comunitaria, traspasar los valores del evangelio, formación y acompañamiento. Trabajamos en las cinco zonas de la arquidiócesis atendiendo a más de 10 mil niños y con cerca de 2 mil monitores”, relata la encargada arquidiocesana de las Colonias Urbanas, Yolanda Urbina, quien además fue una “niña colona”. “Mi experiencia en las colonias fue lo que me guiñó en mi vocación de servicio”.
Semanalmente y durante todo el año, un grupo de jóvenes, principalmente niños y niñas, se reúnen en sus respectivos barrios a reflexionar en torno a las diversas problemáticas que afectan el entorno donde viven. Forman equipos de trabajo, haciendo énfasis en crear espacios permanentes de formación, contando con el apoyo de la comunidad para la preparación y realización de diversas actividades recreativas y educativas que son guiadas por voluntarios, muchos de ellos adolescentes que cuando eran niños vivieron en carne propia lo que era participar de las colonias. El trabajo más intenso es en las vacaciones de invierno y verano.
Niños, Niñas y adolescentes trabajadores (NNats)
Al igual que en las colonias, pero enfocado en adolescentes que desde niños deben trabajar, el programa NNATS busca acompañar de una manera recreativa a los que sufren esta realidad.
Bryan Rodríguez de 15 años participa del programa. Gracias a la ayuda que ha recibido, ha logrado continuar sus estudios a pesar de ayudar a sus padres, que son comerciantes. “Desde los diez años que trabajo, no lo hago porque mi familia me obligue, si no por ayudarlos. Al principio era complicado, sobre todo cuando me invitaban a jugar, pero ahora me gusta trabajar. Aquí me han enseñado a valorarme, he recuperado el tiempo que he perdido producto del trabajo”.
Si bien en los últimos años ha existido un avance en cuanto a la erradicación del trabajo infantil, en la actualidad y según datos de la Encuesta de Actividades Económicas de Niños, Niñas y Adolescentes (EANNA, 2012), en Chile existen 229 mil niñas, niños y adolescentes que están “ocupados” o que trabajan.
La situación de Bryan, y de muchos niños más, es la que busca trabajar esta iniciativa, que desde 1996 y al alero de la Vicaría de Pastoral Social, ha acompañado a unos 10.500 niños y niñas, en alianza con la Fundación Telefónica y la Fundación ANIDE - KNH.
El campamento de verano
“Durante el 2015 el programa acompañó a 550 niños y adolescentes. Sin estigmatizarlos por trabajar, sin perseguirlos a ellos o a sus familias, la vicaría los acoge y acompaña en su situación. Les orienta y motiva a seguir estudiando, a reducir sus horas de trabajo y los vincula con otros niños y niñas trabajadores con quienes comparten experiencias y aprenden de sus derechos”, relata la encargada arquidiocesana del programa, Mónica Ruiz.
Desde el año 2014 se ha decidido dar un paso más adelante, realizando un campamento para niños/as y adolescentes trabajadores prioritarios. El objetivo es crear un espacio de recreación, educación y prevención por tres días, que contribuya a la reducción progresiva de sus horas de trabajo en el periodo vacacional.
Ambos programas, Colonias Urbanas y NNATS, llevarán a cabo, durante este mes, actividades que son fundamentales para el desarrollo de sus estrategias de intervención. Las 76 colonias que funcionan en la Arquidiócesis de Santiago, incrementan su trabajo con los niños y niñas vulnerables durante el período de vacaciones. Por otro lado, NNATS llevará a cabo el campamento de verano que contará con la participación de 80 adolescentes durante tres días en la casa de retiro La Isla de Colina
¿Quieres participar de estos programas?
Teléfono: 27900600 Correo: vicaria@vicaria.cl
Fuente: Comunicaciones Santiago
www.iglesiadesantiago.cl
Santiago, 18 de Enero, 2016
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