Declaración Pública del Arzobispado de Santiago sobre fallo que afecta a Pbro. Artiagoitia
El reciente fallo de primera instancia que afecta al Pbro. José Luis Artiagoitia amerita una reflexión sobre los hechos acontecidos y sobre las circunstancias que han rodeado al llamado “caso Spiniak”.
1. Desde el inicio de este caso nos pareció necesario advertir: “Investigaciones de esta naturaleza ocasionan un sufrimiento indecible tanto a quienes aparecen bajo la sospecha de haber participado en los hechos, como también a sus familias y a las asociaciones en las cuales participan. Lesionar injustamente la buena fama es una acción grave. Por eso, también en estas situaciones hay que tener el máximo de prudencia, y presumir inocente a quien la justicia no ha declarado culpable. Esto vale tanto para las personas como para los medios que informan y forman la opinión pública”. (Declaración Pública, 24 de octubre de 2003.) Asimismo, el Arzobispado instó siempre a los actores de este caso a resolver el tema a través de la Justicia.
2. Una vez más manifestamos nuestra solidaridad con quienes se vieron afectados directamente con estas acusaciones, entre ellos dos servidores públicos, hechos que en su momento consideramos inverosímiles. Gratifica saber que quienes fueron acusados injustamente, tras este fallo se encuentran con la verdad. Esperamos que la resolución contribuya a restituir su honra y a reparar el dolor causado en sus familias.
3. Resulta difícil imaginar la participación de un sacerdote en los hechos, como lo revela la investigación judicial. Como cristianos estamos llamados a actuar de acuerdo a las enseñanzas y al ejemplo de Jesucristo, a buscar siempre la verdad, la justicia y el amor. Este caso nos recuerda las dolorosas consecuencias que puede traer cuando no se actúa de acuerdo a estos principios.
4. Como hemos dicho recientemente, es difícil no ser autocrítico en un caso tan complejo y turbio, y que ha causado tanto daño. Todo lo sucedido lleva a un proceso de reflexión y de aprendizaje, al que invitamos a toda la sociedad.
No quisiéramos terminar sin pensar en los niños cuyo abuso dio origen a todo este caso.¿De qué manera como sociedad hemos atendido sus demandas y sus inhumanas condiciones de vida? Ellos siguen siendo las víctimas ante los ojos del Señor. Volvamos nuestra mirada hacia estos niños. Que nuestro compromiso como país sea darles un presente digno. Así nos aseguraremos que en el mañana sean hombres y mujeres de bien.
Santiago, 5 Mayo de 2006
Ver cronología con los pronunciamientos públicos de autoridades eclesiásticas de Santiago sobre actuaciones del Pbro. José Luis Artiagoitia