En una eucaristía presidida por el Cardenal Arzobispo de Santiago, Monseñor Francisco Javier Errázuriz, la Iglesia de Santiago celebró la festividad de San José Obrero y el día Internacional del trabajador y . A la misa asistieron dirigentes de las tres centrales de los trabajadores, el Ministro del Trabajo Osvaldo Andrade, como también parlamentarios y dirigentes políticos, entre ellos la recién electa presidenta del PDC, senadora Soledad Alvear.
Vicarías de los Trabajadores y de Patsoral Social
A petición del Cardenal Errázuriz, las Vicarías de la Pastoral Social y de los Trabajadores unieron sus equipos y sus esfuerzos para trabajar en pos de una mayor justicia social social y de promoción de la dignidad de toda persona humana. Monseñor Errázuriz encomendó esta tarea al Padre Rodrigo Tupper, quien oficialmente a partir del 30 de marzo pasado se hizo cargo de ambas Vicarías, haciendo del trabajo, sus preocupaciones y esperanzas, un eje central de todo lo social. Ambas vicarías son herederas de una reconocida tradición en la ayuda del más sufriente y perseguido. Una desde la Vicaría para la Solidaridad y la otra desde la Vicaría Pastoral Obrera.
Homiía del Pbro. Rodrigo Tupper
En su primera
homilía de primero de Mayo como Vicario, el padre Tupper no eludió los temas más actuales. “Si como Iglesia de Santiago felicitamos hoy el proyecto que regulará la subcontratación de trabajadores por parte de las empresas, es porque creemos que debe terminarse la injusticia a que hoy están sometidos esos padres y madres de familia. Debe darse a los empresarios –grandes y pequeños- la responsabilidad de garantizar los derechos de los hombres y mujeres que trabajan para ellos, a través de empresas subcontratistas. No nos vengan a decir que respetar sus derechos como corresponde va a crear cesantía. ¿O es que íbamos a encontrar terrible la corona de espinas de Jesús, y no íbamos a levantar la voz para denunciar el sufrimiento de las familias agobiadas por empleos precarios?”, dijo en parte de su homilía.
El Pbro. Tupper recordó tanto palabras del cardenal Raúl Silva Henríquez como de San Alberto Hurtado, sobre la dignidad de los trabajadores y los valores profundos que constituyen el “Alma de Chile”. “Faltan muchas cosas en nuestro país, y a veces vemos que equivoca sus pasos. Hoy hay muchos menos pobres que hace 20 años, pero el escándalo de la inequidad no ha desaparecido. Además, los pobres de ayer, a quienes hoy les alcanza para sacar una tarjeta de crédito de grandes tiendas o supermercados, ahora sufren el agobio de las deudas. Miles de familias están endeudadas por 20 o más veces su sueldo mensual. ¿Por qué? Porque el papá compra regalos para su esposa y sus niños, para compensar las horas que no los ve, el cariño que no alcanza a entregarles cuando llega fatigado, cruzando todo Santiago, los tacos, los Trans Santiago, luego de trabajar 10 o 12 horas. Es una herida provocada en el amor de esas familias, que hoy son menos pobres en cuanto a ingresos, pero no más felices”, prosiguió el Vicario para los Trabajadores y de Pastoral Social.
El P. Tupper también hizo un llamado a llevar con responsabilidad el debate sobre la reforma al sistema de pensiones “Levantamos nuestra oración para que el resultado de esta discusión mire al fondo de los ojos de nuestros jubilados de hoy y de mañana. Exhortamos a autoridades y legisladores a considerar ante todo los valores de la solidaridad y la dignidad humana como la medida última de sus leyes”.
En otro punto de su homilía, el vicario Tupper subrayó en tono enérgico que “No es posible que para conseguir una remuneración decente en el siglo 21 más del 70% de trabajadores de este país deban trabajar mucho más de las ocho horas por las que lucharon y murieron los mártires de Chicago en el siglo 19! ¡Es otra afrenta que hiere el Alma de Chile!”.
Festividad de San José
El 1° de mayo es una importante fecha para la sociedad, los trabajadores y la Iglesia. En 1955, el Papa Pío XII instituyó este día como la festividad de San José Obrero, con el objetivo de que “todos reconozcan la dignidad del trabajo y que ella inspire la vida social y las leyes fundadas sobre la equitativa repartición de derechos y deberes”.
Al término de la Eucaristía el Cardenal Errázuriz conversó con la prensa, recordando las escandalosas desigualdades vigentes en nuestro país. “Lo hemos dicho muchas veces, las desigualdades son escandalosas, estamos concientes de que debemos acortar esas distancias y que es necesario una mejor distribución de la riqueza. Sabemos que es un problema complejo. Contamos con el apoyo de partidos políticos, también de dirigentes empresariales y de todas maneras con los dirigentes sindicales para que esto ocurra en nuestra patria. En todas esas cosas hay que avanzar fuertemente”.
El Arzobispo de Santiago también se refirió a la tarea encomendada al Padre Tupper. “Estoy muy contento de contar con un Vicario para la Pastoral de los Trabajadores y la Social, que pueda acompañar tanto a los trabajadores y a los empresarios en este camino a la luz de la Doctrina Social de la Iglesia”.
Por su parte, el Ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade, reconoció su “gran impacto” por la Homilía pronunciada por el Padre Rodrigo Tupper. “El Vicario apuntó exactamente a la naturaleza de la celebración del día de los trabajadores. Fue una gran Homilía. Me marcó mucho el llamado que hace, a propósito de la contingencia, a respaldar el proyecto de sub contratación. Es muy gratificante escucharlo y refuerza el gran esfuerzo que tenemos que hacer como Gobierno para llevar el desarrollo entre los trabajadores, nuestro gran desafío”.
La recién electa presidenta de la Democracia Cristina, Senadora Soledad Alvear, también se refirió al mensaje del Vicario. “Ha sido extraordinariamente contundente. Es un llamado a un Chile que progresa a tener realmente mejores condiciones de trabajo para todos.”
El Padre Rodrigo Tupper agradeció las muestras de apoyo y los aplausos recibidos al término de la Homilía y al ser consultado por la prensa sobre la posibilidad de actuar como intermediario en las negociaciones entre las centrales sindicales, los partidos políticos y el Gobierno, recordó la vocación de la Iglesia. “La Iglesia siempre quiere tender puentes y poner la mesa, de manera que los distintos actores sociales que a veces pueden estar divididos en sus opiniones, tengan un espacio donde encontrar y alcanzar los acuerdos que necesitan sobre todo los más pobres de Chile.”
Tras la eucaristía, el padre Tupper acompañó a los asistentes que se dirigieron hacia los actos convocados para el mediodía por la Central Unitaria de Trabajadores, CUT.
Ver texto ccompleto de la homilía del Pbro. Rodrigo Tupper
Fuente: Comunicaciones Vicarías Social y de los Trabajadores