En medio de villancicos chilenos, niños con trajes de huaso y la representación de un pesebre, el Cardenal Francisco Javier Errázuriz presidió esta mañana una misa con más de 700 familias y apoderados del colegio Juan Luis Undurraga, quienes luego de la misma recibieron una caja con elementos no perecibles para celebrar de manera más digna su cena de Navidad.
Durante su homilía, el Cardenal hizo una catequesis referente al nacimiento de Jesús “el gran don del cielo es que Jesucristo llegó hasta nosotros. No pudimos haber recibido un regalo mejor, nunca lo habríamos soñado si quiera –dijo a los asistentes-. Dios mismo quiso hacerse hermano y Redentor nuestro”. Añadió que “vivimos en una cultura que trata de alejar la presencia de Dios de la vida pública. En Europa eso ha ocurrido muchísimo y también en Chile muchas veces nos dicen que hay otras maneras de vivir que no son las de nuestros antepasados”. Puntualizó, “quieren cambiar el sentido al matrimonio, el sentido de la familia, que se puede disponer de la vida, que se puede abortar...una cantidad de cosas absurdas que no hacen feliz a nadie”.
Distribución de Cajas de Navidad
Siete mil fueron las Cajas de Navidad reunidas por la Fundación Emel en todo Chile. 750 apoderados del Colegio Juan Luis Undurraga de la Fundación Belén Educa se beneficiaron con ellas. Margarita Muñoz, madre de tres niños que estudian en el Colegio se siente alegre y agradecida,“todas las Navidades son únicas, pero esta es especial porque no pensamos tener una caja que nos ayudara en esta Noche Buena”. Respecto a la Eucaristía, señaló “es muy emocionante ver al Cardenal tan cerca y poder tener su mensaje en esta fecha tan importante”. Por su parte, Francisco Soler, padre de una pequeña que asiste a kinder al colegio, dice que haber recibido la caja de alimentos en esta Navidad es un regalo del cielo y es algo “muy bonito, el cardenal nos trajo el mensaje de que hay que vivir en paz y en armonía. También estoy muy agradecida por la caja, siempre es bueno compartir con las familias que tienen más necesidades”.
Respecto a la experiencia de las Cajas de Navidad, que tiene larga data en parroquias del sector oriente de Santiago, señaló: “Es algo extraordinario. Ha ocurrido en muchas parroquias y empresas. Es una muestra de cómo la gente comprende el misterio de la Navidad, donde Jesucristo llega al lado nuestro como el gran regalo del Padre y esto conmueve nuestro corazón hacia la solidaridad. Creo que es el misterio de Belén presente en nuestro pueblo”.
Fuente: DOP Santiago
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Santiago, 23 de Diciembre, 2005