Ver galería de fotos

Por parte de la inmobiliaria Lo Campino firmó José Miguel Guzmán, perteneciente a una antigua familia de Quilicura, propietaria de un fundo que ocupaba los terrenos del actual complejo habitacional, donde viven alrededor de 4 mil familias. El documento, suscrito también por el cardenal Ricardo Ezati, contempla que dentro de dos años deberán estar terminados todos los trámites legales de la donación, plazo en el que deberá también iniciarse la construcción del templo.

José Miguel Guzmán expresó que esta donación “fue un compromiso de mi padre y de su socio de la Inmboliaria Manquehue, porque la familia Guzmán siempre ha estado ligada a la Iglesia y a obras de ayuda a la comunidad”. Por su parte, el párroco de San Alberto Hurtado, padre Jerónimo Walker, señaló que “para la parroquia es un momento muy especial, porque es una comuna de crecimiento explosivo y es urgente la construcción de nuevos lugares para celebrar la Santa Eucaristía. Aunque el Valle Nuestra Señora de Lo Campino es un sector de la parroquia, por su crecimiento tiende a transformarse en el futuro en una nueva parroquia”.

La dignidad más grande es ser hijos de Dios

La misa fue presidida por el Arzobispo de Santiago, concelebrada por el párroco y por el diácono Iván Díaz, y contó con la participación de gran cantidad de fieles que rebasaron la capacidad de la capilla. En su homilía, el cardenal Ricardo Ezzati, a partir de los textos de la misa de este domingo, expresó que en los tiempos actuales “pareciera que muchas personas están satisfechas con sus bienes materiales, con su poder y su orgullo, pero cuando se llega al corazón de esas personas, nos damos cuenta que hay un vacío existencial en sus vidas”. Agregó que “la existencia nuestra está llamada a ser un gran proyecto de amor, de solidaridad, de esperanza en Jesucristo”. La fe, afirmó el pastor, es el bien más grande de nuestra vida, porque desde la vida en unión con Dios “todas las cosas materiales adquieren su verdadero sentido y significado”. Luego, el Arzobispo de Santiago, llamó a esta comunidad a no tener miedo de proclamar esta verdad en la actual Misión Territorial.

Más adelante, el cardenal Ezzati indicó que la tarea del cristiano, que ha recibido el don de la redención, es hacer presente ese don del amor de Dios en el mundo de hoy, que da al ser humano la dignidad de ser hijos de Dios, de compartir esa filiación en la comunidad cristiana.

La patria necesita un alma viva

Respecto de la construcción del futuro templo en el Valle Lo Campino, animó a los presentes a ser cada uno un templo vivo de Dios, con Cristo como cabeza, para que su gloria se manifieste en la vida familiar y en la vida de esta comunidad. Además, el arzobispo agradeció a la inmobiliaria la donación del terreno y los aportes y trabajo de los vecinos del sector para llevar a cabo la tarea de financiar esta obra. También informó que actualmente en la arquidiócesis hay 26 proyectos de templos y capillas en marcha, lo que supera con creces las posibilidades de la Iglesia local, pero que pueden concretarse con la ayuda de las propias comunidades y los aportes de empresas y de particulares.

El cardenal Ezzati se mostró esperanzado en estas iniciativas, “porque nuestra patria lo que más necesita es tener un alma viva, que es la fe en Jesucristo, que Dios sea alabado y la comunidad cristiana tenga la casa donde poder encontrarse con el Señor, constituir una comunidad viva, que sea presencia evangelizadora en nuestra ciudad”.

Al final de la ecuaristía se procedió a la firma del mencionado protocolo, tras lo cual la comunidad compartió en un ágape la alegría por esta donación y la posibilidad concreta de contar en el mediano plazo con un templo nuevo.

Fuente Departamento de Comunicaciones www.iglesiadesantiago.cl

 Cardenal Ezzati en misa con comunidad de villa Lo Campino