Con el objetivo de continuar afianzando la cultura solidaria, siempre en ayuda del más necesitado, los jóvenes de la diócesis, siguiendo el ejemplo de San Alberto Hurtado, mostraron el espíritu solidario que los identifica, en la tradicional recolección de alimentos, la cual se realizó como parte de las actividades programadas en el Mes de la Solidaridad.
Un centenar de jóvenes se sumaron a la cruzada iniciada a las 09:30 horas de la mañana con la celebración de una Liturgia de Envío, en la catedral “San Mateo”. Posteriormente los jóvenes se dirigieron a los distintos sectores en donde desarrollaron esta noble tarea.
Con gran entusiasmo los grupos juveniles visitaron las casas de Rahue, V Centenario, Ovejería, distribuidas en los decanatos Centro y Rahue, en donde fueron recibidos cordialmente por los moradores, los cuales se mostraron dispuestos a colaborar. El centro de acopio se estableció en la catedral”San Mateo”.
Soledad Tejeda, coordinadora de la Pastoral Juvenil Diocesana manifestó su agradecimiento a los jóvenes, a la comunidad por su buena disposición para colaborar, entregando alimento a quienes hoy no tienen. También expresó un reconocimiento a todos los sacerdotes que se sumaron en esta cruzada solidaria, poniendo a disposición sus Parroquias.
En otro momento agradeció también la participación de las comunidades y grupos juveniles, entre ellos: Consejo de Servicio CVX, Equipo de Servicio de la PJ Diocesana, J.M.C (Jóvenes Misioneros de Cristo) de San Pablo, Servidores del Altar de la Parroquia “Reina de los Mártires”, acompañados por el Diácono en tránsito Felipe Fernández, a los hermanos y hermanas de J.S.F. (Jóvenes Sin Frontera) Osorno, a los jóvenes del Grupo de Confirmación de la Parroquia “Sagrado Corazón”, entre otros.
Esta acción social, en beneficio de los más necesitados, demuestra el gran compromiso de los jóvenes con su tiempo y su realidad. Las caminatas y recorridos, la buena disposición para ayudar y la consciencia adquirida, son una muestra fehaciente del espíritu de solidaridad que los identifica, siguiendo el ejemplo de San Alberto Hurtado, quien nos recuerda que “darse a los hermanos, ¿no es acaso darse a Cristo? Mientras más amor hay, más se sufre: el deseo de hacer siempre el bien, de socorrer a los desgraciados, de siempre enseñar y siempre adaptar la verdad cristiana, todo esto no se puede realizar sino en ínfima medida".
Fuente: Comunicaciones Osorno