Es por eso que la Iglesia diocesana este año bajo el lema
“Con alegría… vayamos al encuentro del hermano”, y siguiendo el mensaje del Papa Francisco de ser una “Iglesia en salida”, invita a la comunidad durante todo agosto a celebrar el Mes de la Solidaridad para que se sumen a las diversas campañas de recolección; como la de alimentos, dirigida a las familias más pobres, y que serán impulsadas por los Comités de Acción Fraterna en cada parroquia; la de carbón o leña, que busca brindar apoyo a quienes no tienen muchos recursos para calefacción en esta parte final del invierno, la que será emprendida a nivel de los equipos de pastoral juvenil de las parroquias y colegios; y la de ropa de abrigo, ropa interior, y útiles de aseo para internos de las cárceles de la provincia y personas en situación de calle, que se promoverá a nivel de los distintos ambientes pastorales.
Dentro de las más de 25 sugerencias que se están trabajando a nivel diocesano, se destaca la confección de cuadros de tejido, de 20x20 cm, para elaborar frazadas que posteriormente se puedan regalar a quienes más lo necesiten.
Por su parte el pastor diocesano como siempre semana a semana pondrá el acento en mantener el contacto directo con los menos favorecidos, recordando la figura de San Alberto Hurtado. Así también este 2014, velará por destacar la labor de quienes mantienen una actitud de solidaridad permanente durante todo el año cuando visite a las Damas de Celeste el próximo 12 de agosto en el Hospital Herminda Martin. (Ver Programa adjunto)
“Hablar de solidaridad, marchar por la justicia, o marcar este mes con un mero evento público, no basta, lo que se requiere es un cambio en el corazón y desde el corazón de cada uno. Nada se saca con dar una limosna, ser generosos en una noche fría distribuyendo pan y café en alguna calle de la ciudad, o construir más casas de emergencia, si no se cumplen las exigencias de la justicia, expresando el sentido social”, subraya el obispo.
Encuentros con personas en situación de calle, y con quienes están privados de libertad, como también visitas a hospederías, y la celebración del Día Nacional del Solidaridad, también serán parte de las distintas instancias que encabezará el obispo durante el mes de agosto que ya se inicia.
Cabe recordar que el Mes de la Solidaridad fue instaurado por la Iglesia Chilena en virtud de la proyección del amor fraterno dentro de nuestra sociedad, a la luz de la vida y la obra del Padre Alberto Hurtado, quien falleció el 18 de agosto de 1952. De ahí que en el año 1994, esa fecha haya sido instaurada por el Congreso como el Día Nacional de la Solidaridad.
Fuente: Comunicaciones Chillán