Iglesia de Atacama vivió su primera Asamblea diocesana Pastoral del año, centrada en la Misión Territorial
Casi cuatrocientas personas de toda la diócesis se reunieron este sábado 29 de marzo en el salón La Merced del Liceo Católico, para vivir la Asamblea diocesana de Pastoral. Los convocados eran miembros de los consejos parroquiales, representantes de los colegios católicos, movimientos y fundaciones sociales, junto a los sacerdotes, religiosas y diáconos.
La jornada comenzó con la lectio divina a cargo de Leontina Acevedo y la Hna. Olga Quintero, sobre el pasaje del evangelio de Lucas 5, 1-11.
Atacama en Misión Territorial
El primer expositor fue el Obispo. Monseñor Gaspar Quintana compartió el tema “Vayan por todo el mundo y anuncien la Buena Nueva a toda creatura”. Él se refirió a lo que significa la “Buena Nueva” hoy, y cómo continuar la misión de Jesús en Atacama, en el marco de la Misión Territorial. Concluyó motivando a una actitud interior de escucha y de salida, y de tener conciencia que esta Misión es “un momento en un proceso sin fin”. Llamó a ser “misioneros en terreno” y a mirar a María como “modelo de mujer creyente, ‘manantial de alegría para los pequeños’”.
Luego de un breve descanso y un café, la asamblea continuó con la Hna. Inmaculada Quijano, que presentó el tema “Camino recorrido y desafíos pastorales”. Revisó hitos como Aparecida, el Evangelio de Chile, el concepto de la “mesa para todos”, la Virgen del Carmen Misionera, la Misión Joven, la Cruz Misionera y la JMJ.
Sobre la Misión Territorial, la Hna. Inmaculada reiteró el llamado a anunciar a Jesús siendo una Iglesia misericordiosa que sale al encuentro. También detalló las distintas etapas de esta Misión en Atacama.
Las actividades de la tarde comenzaron con el P. Alejandro Castillo Camblor, Vicario General y Pastoral, quien presentó las Acentuaciones Pastorales de la diócesis, desde la Misión Territorial, en torno a tres ejes: encuentro con Cristo, Conversión y Misión permanente. Mencionó los objetivos específicos del trabajo, como son la familia, la comunidad eclesial y los misioneros.
Testimonio y envío
Luego se realizó un panel con cuatro personas que entregaron sus testimonios de vida eclesial y compromiso misionero. Un matrimonio, una joven y una profesora, compartieron con la asamblea sus experiencias de conocer al Señor y contagiar su fe en sus distintos ambientes.
Al final de la jornada se celebró la liturgia de envío, dirigida por el Vicario del valle centro, P. Juan Barraza. Uno de los momentos de esta liturgia fue la frase “Echen las redes”, construida con letras sostenidas por personas de la comunidad. El segundo momento fue un signo de solidaridad con la comunidad de Diego de Almagro: la recolección de sobres con los aportes de la campaña de reconstrucción de la capilla San Alberto Hurtado, incendiada a principios de año. Por último, el momento final fue una bendición de la asamblea hacia el Obispo, quien está celebrando sus 50 años de sacerdocio.
La Asamblea concluyó con un fraterno y alegre saludo entre los asistentes.
Fuente: Comunicaciones Copiapó