“Nos sentimos muy conmovidos por lo que ocurrió”, dijo el candidato presidencial del PRI, tras expresar su solidaridad al Arzobispo de Santiago, monseñor Ricardo Ezzati, por las injurias de que fue objeto la Iglesia Catedral el pasado 25 de julio.
“La Catedral es un refugio que pertenece a todos los chilenos –agregó Israel–, siempre ha sido así en la historia y, probablemente, los mismos grupos que la ofendieron, si en Chile hubiera una dictadura en lugar de democracia, encontrarían en la Catedral un refugio”.
El templo fue reabierto el miércoles 31 con una multitudinaria misa de desagravio, en que decenas de autoridades eclesiales y laicas manifestaron su apoyo a la Iglesia de Santiago y su repudio a la intolerancia.
Fuente:
Comunicaciones Iglesia de Santiago.
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