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Desde su experiencia en Estado Unidos, el experto reflexionó cómo la Iglesia en ese país es muy diversa y a la vez muy dividida. "No debemos temer a la diversidad en la Iglesia. Que seamos distintos no es un problema, es un tesoro. Debemos celebrar la diversidad. Lo malo es cuando la diversidad se transforma en división. Si miramos claramente a la Iglesia, lo real es que no sólo somos diversos, sino que estamos divididos".

Agregó que el estar enojados los unos con los otros no es una buena estrategia misionera. "Nadie se va a querer unir a una Iglesia donde se pelean entre ellos. Debemos mostrar una mirada positiva para comunicar de manera persuasiva a los jóvenes que buscan tomar una elección entre todas las ofertas que les da este mundo y si nosotros estamos divididos no será la manera de lograrlo. La unidad es la clave de la Nueva Evangelización".

Finalizó asegurando que él no tiene una respuesta perfecta a este problema y que lo único que funciona para promover la unidad es la amistad para que fruto de ella nazcan adecuadas sinergias apostólicas. "Debemos hacer un gran esfuerzo por promover zonas de amistad. La clave es hablar desde el corazón, ser transparente para crear la unidad".

Una Palabra más atractiva a los hombres de nuestro tiempo

Por su parte, el padre José María La Porte, Decano de la Facultad de Comunicación de la Pontificia Università della Santa Croce, habló sobre cómo comunicar en positivo a la Iglesia. "En comunicaciones tenemos tendencia a generar un espiral del silencio que impide hablar de algunos temas como si hubiera un luto en la familia que no logramos superar", aseguró.

Para superar ese luto, ese color negro, propuso expresar de forma artística la comunicación a través de una policromía de colores. "Esto no significa esconder la realidad porque la realidad es en color".

A modo de ejemplo dijo que el azul podría representar la mediación del sacerdote entre el cielo y la tierra. "Debemos dedicar una estrategia comunicativa para explicar este rol". También habló del verde, resaltando la figura del sacerdote como educador en la fe. En este sentido, recomendó destacar su formación a nivel comunicativo y ayudarlo también a mantener cierto nivel intelectual que lo haga más atractivo a la hora de sus reflexiones.

Entre todos los colores que nombró, indicó que debe haber una armonía entre ellos para que haya un equilibrio a la hora de pintar en colores el rol del sacerdote. "Debemos promover que la Palabra de Dios sea más atractiva a hombres de nuestro tiempo, ya que está la tentación de pensar que es un mensaje irrelevante, siendo que es un mensaje que salva".

Otros expositores de la jornada fueron Gustavo Entrala, Director General 101, Jorge Armstrong, Presidente de Armstrong y Asociados y Gustavo Ron, guionista y director de cine, quienes hablaron la Iglesia como marca y qué hacer para que vuelva a ser confiable para los jóvenes.

Por la tarde, participaron José María Irisarri, Presidente de Onza Partners y el director de cine Nicolás Acuña, quienes compartieron un panel con Gustavo Ron para hablar de los jóvenes y la ficción y la relación que esto tiene con la fe. Conversación que fue sucedida por el panel dirigido por el Portavoz de la CECh, Jaime Coiro, quien se encargó de presentar a Ryan Worms y Bosco Ybarra, que compartieron sus testimonios en el marco del tema "Jóvenes y solidaridad: historias de oración y acción".

Fuente: Prensa CECh

 Segundo día II Seminario Iglesia y Comunicación

  John Allen Jr.

  Pbro. José María La Porte