16 personas fallecidas entre ellas nueve menores de edad. El saldo de un fatídico accidente que enluta a los hinchas de O'Higgins de Rancagua; a esa ciudad, y al país en general. Un hecho que monseñor Ezzati lamentó tras participar de una eucaristía en la localidad de Rungue, comuna de Til Til. "En primer lugar, una palabra de consuelo a las familias. Frente a una tragedia tan dolorosa, lo que más sirve es descubrir cómo el corazón humano está hecho para amar, para comprender y acompañar"; expresó el Arzobispo de Santiago.
Monseñor Ezzati, quien retoma sus actividades tras una semana de descanso, manifestó que "estamos haciendo presente la actitud misericordiosa del Padre Dios, que está cerca de las víctimas y que está cerca, sobre todo, de las personas que sufren por la tragedia acontecida".
El pastor de la Iglesia de Santiago llamó a rezar "para que el consuelo llegue a las familias y también para que en este momento de dolor podamos descubrir lo que más importa en la vida".
En sus palabras, el arzobispo resaltó que "siempre una muerte natural, pero también una muerte trágica, nos invita a ir más allá del acontecer diario y preguntarnos qué cosa de verdad es importante, qué cosa vale en la vida humana. Jesús ha dicho que no gana nada el hombre con ganar el mundo entero si después pierde la vida. Esta tragedia, junto con despertar nuestra solidaridad en la oración y en la cercanía a las familias, para cada uno de nosotros tiene que ser una oportunidad para reflexionar sobre el gran valor de la vida y lo que es la misión de nuestra vida", concluyó.
Fuente: Comunicaciones Iglesia de Santiago
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