La Iglesia Católica se ha acercado a la unidad militar de Los Ángeles para dar una palabra de consuelo a los familiares de los conscriptos fallecidos y de aquellos desaparecidos en la zona de Antuco.
Hasta la unidad militar de Los Ángeles llegaron el Obispo diocesano, Mons. Miguel Caviedes; y el Obispo Castrense, Mons. Juan Barros, para expresar su solidaridad a los familiares y al Ejército.
También se han hecho presentes en el lugar sacerdotes de la diócesis y capellanes castrenses para presidir misas y responsos por el eterno descanso de los militares fallecidos, y para orar por el destino de los desaparecidos y la paz espiritual de sus seres queridos.
Escuchar a los familiares, y acompañarles en su dolor e incertidumbre; así como acompañar al Ejército, a sus jefaturas y personal en este momento tan complejo, son las principales tareas pastorales que han cumplido los sacerdotes en el lugar.
También han llegado religiosos y laicos a colaborar a través de distintos servicios, principalmente en el acompañamiento psicológico de los familiares.
Ver más sobre presencia de sacerdotes en la zona
Fuente: Prensa CECH