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Evocando las palabras del cardenal Raúl Silva Henríquez, quien nos decía que “La Patria se constituye en el momento en que un grupo de hombres que habitan físicamente un territorio, reconocen como suyo un mismo patrimonio de sangre y cultura y entran en comunión de tarea y destino”, Monseñor Manuel Camilo Vial, inició así la homilía por el 201 aniversario patrio en el Templo Catedral de la ciudad de Temuco, celebración que contó con la presencia de diversas autoridades del Gobierno Regional encabezadas por el Intendente Sr. Andrés Molina Magofke, autoridades civiles y militares, religiosas, entre otros.

En la ocasión, el Obispo diocesano señaló que “ El 18 de septiembre es el día de la Patria, la festividad que nos identifica por excelencia y por lo tanto es una ocasión privilegiada para mirarla en su grandeza y en sus debilidades y para renovar nuestro firme compromiso con ella (…) es el momento para convertirnos, porque lo central de la Patria somos nosotros mismos, sus hijos. Tenemos que reencontrarnos los chilenos de distintas etnias, de distintas creencias, de distintos grupos sociales”.

Agregó que “Chile es hoy una real y fundada esperanza (…) Chile tiene hoy todas las posibilidades de llegar a un desarrollo con rostro más humano y nadie puede restarse a esta tarea”. Llamó a que la construcción de la Patria no se limite a la producción material sino más bien a que “el alma del progreso es el progreso del alma”.

Al abordar la situación de los jóvenes estudiantes, el Padre Obispo nuevamente recordó al Cardenal Silva en su “Sueño para Chile” señalando que” nada sacamos con mejorar los índices de economía o con levantar grandes industrias y edificios, si no crecemos en nuestra capacidad de amar”. Palabras que fueron complementadas diciendo que “seis temas agitan la conciencia nacional, seis temas que se entrelazan, que se condicionan mutuamente y que deben ser enfrentados en su conjunto.-la desigualdad social y las discriminaciones injustas, - la calidad de la educación, -la estructura política, -el fin al lucro, -el resguardo de la naturaleza en que vivimos, -una nueva relación con el pueblo mapuche y las etnias originarias con respeto de sus culturas y derechos.

Finalmente, se refirió al accidente en la isla Juan Fernández, culminando sus palabras diciendo que “En ese doloroso momento, Chile ha vuelto a mostrar lo mejor de sí mismo en respeto, solidaridad y en su comprensión del sentido último de la vida humana (…) El Señor coloca en nuestras manos el destino de Chile. Elevemos nuestras súplicas para que El, que es rico en misericordia, nos ilumine y fortalezca para construir la Patria que el Señor Jesús ha soñado para nosotros”.

Fuente: Comunicaciones Temuco

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