“El migrante en Chile es una persona que ha tenido que salir de su país por distintas razones; nadie quiere salir de su tierra y Chile es un país acogedor, especialmente para las personas que necesitan y la Iglesia Católica está convencida que somos todos hermanos y los acoge con cariño y los apoya para que puedan llevar aquí una buena vida. Por eso, el 4 de septiembre hemos celebrado esta misa donde han venido personas de muchas partes del mundo que se encuentran en la región y nos ha parecido importante hacer un signo de unidad y de apoyo a estas personas, que en general pasan por dificultades de todo tipo”, expresó el Arzobispo.
Monseñor dijo que los migrantes llegan a nuestro país, con muchas ganas de trabajar y piden que se les abran las puertas. “Todos hacen sus trámites y, en ese sentido, INCAMI los ayuda y la Gobernación Provincial es muy activa para que puedan estar en el país, de manera legal y puedan ejercer sus derechos; son personas que quieren formar su familia, muchos tienen hijos chilenos, y creo que una actitud cristiana es justamente acogerlos y apoyarlos. Este es el signo que hacemos en esta misa”, subrayó.
El Arzobispo dio a conocer que apenas asumió en la diócesis, se reunió con la Pastoral del Migrante y notó una acción muy afectiva, pero también muy efectiva. Luego recordó su experiencia personal. “Me siento muy comprometido con los migrantes, porque yo también soy nieto de inmigrantes, mis abuelos llegaron 100 años atrás, jóvenes, llenos de esperanza a este país maravilloso. No hay mejor lugar para acoger a los migrantes que la Iglesia Católica, porque estamos convencidos porque tenemos lazos muy profundos entre todos los seres humanos y el lazo más profundo es que somos hijos de Dios”, expresó.
Agregó que “el talante y peso específico de un país se mide en la capacidad de acoger a aquellos que, por distintas circunstancias de la vida, han tenido que emigrar. Creo que Chile va por esta senda y la Iglesia lo expresa a través de una activa Pastoral de los emigrantes”, enfatizó.
En la celebración, hubo signos como la presencia de migrantes de distintas naciones, con trajes típicos y portando las banderas de sus respectivos países. También se hizo entrega de cajas con productos no perecibles como gesto de solidaridad. Ida González Pastrana, migrante, “mexicana de corazón y más chilena por convicción”, señaló estar convencida que “hemos llegado a Chile por una u otra razón, en busca de sueños y esperanzas. Hoy, queremos agradecer a esta tierra hermosa y a su gente por habernos acogido de manera tan generosa, lo que ha hecho que la lejanía de nuestras tierras, tradiciones, nuestra cultura, la ausencia física de nuestra familia, sean más llevaderas y sintamos a Chile como nuestro hogar y segunda patria”.
En esta oportunidad, se hizo un reconocimiento público a Luis Navarro, jefe de Extranjería de la Gobernación Provincial, por su activa acción y servicio en la Pastoral de Migrantes, a favor de los extranjeros que llegan a la zona. El Consulado General del Perú, en Chile, le hizo entrega de un diploma de reconocimiento.
Fuente: Comunicaciones Concepción