Más de cinco mil jóvenes se reunieron en la noche del jueves en el Santuario del Cerro San Cristóbal, convocados por la Vicaría de la Esperanza, para participar en la vigilia de canto y oración en memoria del Papa Juan Pablo II, cuyas exequias se realizaron esta mañana en el Vaticano. Otros cientos de fieles se congregaron en el Santuario Nacional de Maipú y en la parroquia Jesús Señor de la Vida, en la población La Bandera, en la Zona Sur de nuestra capital. En tanto, varios colegios –entre ellos San Marcos y Sagrados Corazones de Alameda- y comunidades cristianas de trabajadores también organizaron vigilias en memoria del San Padre.
Más de cinco mil jóvenes se reunieron la anoche en el Santuario del Cerro San Cristóbal, convocados por la Vicaría de la Esperanza, para participar en la vigilia de canto y oración en memoria del Papa Juan Pablo II, cuyas exequias se realizaron esta mañana en el Vaticano. Otros cientos de fieles se congregaron en el Santuario Nacional de Maipú y en la parroquia Jesús Señor de la Vida, en la población La Bandera, en la Zona Sur de nuestra capital. En tanto, varios colegios –entre ellos San Marcos y Sagrados Corazones de Alameda- y comunidades cristianas de trabajadores también organizaron vigilias en memoria del San Padre.
1.-En vigilia de oración por la pascua de Juan Pablo II:
Jóvenes acogen el legado del Papa para ser protagonistas de la historia
En el santuario del Cerro San Cristóbal, desde donde Juan Pablo II bendijo a todo el país el 1 de abril de 1988 durante su visita apostólica, jóvenes católicos de Santiago oraron por su descanso eterno y escucharon el mensaje dirigido a ellos hace 18 años atrás. Con esta vigilia quisieron revitalizar la Misión Juvenil y la participación de la delegación chilena en la Jornada Mundial de la Juventud a realizarse en Colonia, Alemania, junto al nuevo Papa.
Unidos en una vigilia celebrada en el Cerro San Cristóbal a los pies de la Virgen María, a quien el Pontífice se entregó por entero, más de cinco mil jóvenes acompañaron con cantos y oraciones sus exequias y volvieron a acoger el mensaje que él dirigió a los jóvenes en el Estadio Nacional, durante su visita en 1987.
La liturgia -organizada por la Vicaría de la Esperanza y realizada en la noche del jueves 7 de abril-, fue presidida por Monseñor Ricardo Ezzati, Obispo Auxiliar de Santiago, quien llamó a los presentes a sentirse animados por el testimonio del Papa en la Misión Juvenil que se está llevando a cabo en todo el país, cuyos frutos serán compartidos en la XX Jornada Mundial de la Juventud en Colonia, Alemania.
La jornada estuvo marcada por un profundo recogimiento y también por signos de esperanza y alegría. Los jóvenes renovaron su compromiso misionero y descubrieron una placa recordatoria con la inscripción: “Jóvenes chilenos, no tengáis miedo de mirarlo a Él”.
El Vicario de la Esperanza Joven, padre Galo Fernández, destacó que en la vigilia primó un ambiente de dolor por la pérdida de un ser querido, de gratitud por su legado y de esperanza en el futuro de la Iglesia. Por eso llamó a los jóvenes a que, inspirados por el mensaje de Juan Pablo II, sean cada vez más protagonistas de la historia y promotores de los valores del Evangelio en la sociedad.
2.-Pobladores recordaron a Juan Pablo II
Pobladores de la Zona Sur de Santiago eligieron el Parque La Bandera, el mismo lugar donde estuviera el Santo Padre hace 18 años, para recordar al Papa Juan Pablo II. Más de trescientas personas peregrinaron, a partir de las 22:00 horas, desde la Parroquia Jesús Señor de la Vida, ubicada al interior de La Bandera, hasta el mencionado parque, congregándose cerca de la cruz que conmemora la visita del Santo Padre, ubicada entre las avenidas Américo Vespucio y Santa Rosa.
Para muchos de los asistentes, la procesión y la liturgia que vivieron anoche fueron tan emocionantes como el mismo encuentro con el Pontífice el 2 de abril de 1987. En el ambiente se respiraba mucho recogimiento y gratitud “por haber visitado a los más pobres de Santiago y haber compartido el pan y el té con nosotros”, como dijeron algunos asistentes.
Con cantos y velas, los pobladores hicieron nuevamente suyo el mensaje del Santo Padre, especialmente, lo referido a las familias, las comunidades cristianas de base, la opción preferencial por los pobres y la solidaridad. Guiados por el Vicario de la Zona Sur, Mons. Cristián Precht; y por el Padre Ignacio Pérez, vicario parroquial de Jesús Señor de la Vida, los asistentes hicieron pública su fe en el Señor, “para configurarse con Cristo”, como dijera Mons. Precht. “Esta es la fe de Cristo, esta es la fe de la Iglesia”, señaló el Vicario de la Zona, emocionado al comentar el fervor de los asistentes. Durante la misma ceremonia, los matrimonios asistentes renovaron sus promesas matrimoniales teniendo a sus vecinos por testigo.
Cerca de la medianoche, los pobladores regresaron a la Parroquia Jesús Señor de la Vida, para seguir a través de una pantalla gigante la transmisión de la Misa de exequias del Santo Padre, celebrada en la Plaza de San Pedro, en Roma.
Testimonios
Entre los asistentes a la vigilia de La Bandera estuvo Mario Mejías. No era un poblador más. De inmediato fue reconocido por el resto de los asistentes. Él fue el encargado de hablar, a nombre de los pobladores de Santiago, en el encuentro con el Santo Padre aquel 2 de abril de 1987, durante su visita a Chile. “Aún siento la presencia del Papa acá en medio de nosotros”, comenta mientras sigue la peregrinación junto a su esposa. Hace 18 años sacó la voz por los pobladores y se refirió a la represión y al temor en que vivían. Luego de su intervención, el Papa lo abrazó. “Eso fue lo más grande, es lo que más recuerdo. Lo sentí como un Padre, como el Padre de todos que acogía en sus brazos a un humilde poblador. No tengo palabras para describir ese momento”, recuerda emocionado.
Luego de su intervención en este encuentro, Mario Mejías sufrió la represión, incluso perdió al segundo de sus hijos; sin embargo, para él, todo su sufrimiento ha valido la pena. “Creo que Juan Pablo II va a ser recordado por su santidad, por su estilo de vida y por todo lo que hizo por las naciones”.
Vilma Riquelme participa en la parroquia Jesús Señor de la Vida desde hace 19 años. Sirve pastoralmente en la capilla Madre de la Esperanza. Es esposa de un diácono permanente. Afirma que la frase del Papa que más le llegó, durante su visita a Chile, fue “el amor es más fuerte”. Explica, “siempre que he estado en dificultades me acuerdo de esas palabras y de ahí saco fuerzas para seguir adelante”.
Javier Bastías tenía quince años cuando el Papa estuvo en La Bandera. Recuerda que llegó muy temprano junto a su padre. De vista, le impresionó el escenario, pero lo que más le impactó fue la fuerza que Juan Pablo II imprimía en sus palabras, sus gestos y su misma presencia. “En ese tiempo no estaba muy cerca de la fe católica, ahora sí lo estoy. Con el transcurso de los años, he conocido a varias personas y sacerdotes, pero nadie con el carisma de Juan Pablo II”, dice.
Pamela Serey tenía sólo dos años en 1987. Por lo que le han contado, la visita del Papa Juan Pablo II fue decisiva para la vida del país. “Nos trajo paz, luz y esperanza” señala. Confiesa que asistió a la vigilia de anoche, mientras en Roma se realizaban las exequias del Santo Padre, porque sus padres fueron guardias papales hace 18 años. “A pesar de que él ya no está con nosotros, estoy contenta porque sé que está en el cielo intercediendo por nosotros”, señaló.
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3.-En el Santuario Nacional de Maipú
Más de mil quinientas personas participaron en la vigilia que se realizó toda la noche de ayer jueves y la madrugada de hoy viernes en el Santuario Nacional de Maipú, en memoria del Papa Juan Pablo II.
La vigilia se inició con una Eucaristía presidida por el Vicario de la Zona Oeste, Pbro. Pedro Pablo Garín. La homilía estuvo a cargo del Padre Carlos Cox, Rector del Santuario, quien destacó el gran legado que ha dejado el Santo Padre para toda la Iglesia universal y para le mundo. También se manifestó muy contento de congregarse en este templo mariano para vivir este histórico momento como comunidad, y despedir a quien fuera Vicario de Cristo.
Tras la Eucaristía hubo adoración al Santísimo Sacramento por parte de los fieles. Fueron momentos de reflexión y oración. Posteriormente, cerca de las cuatro de la mañana medio millar de peregrinos siguió la transmisión por televisión de la Misa fúnebre presidida por el Cardenal Joseph Ratzinger, en la Plaza de San Pedro. La transmisión se vivió en un clima de profundo recogimiento, y generó en los presentes una espontánea y entusiasta participación, que permitió olvidar por un instante los miles de kilómetros que separan a Chile del Vaticano.
La vigilia concluyó con una Misa, a las 8:00 horas, presidida por el Padre Carlos Cox, quien se manifestó muy contento por la respuesta de los fieles de la comuna de Maipú. “Hemos sido testigos de hermosos testimonios de fe y de fervor popular, lo que demuestra que el Papa Juan Pablo II caló hondo en el pueblo chileno y sus enseñanzas siguen siendo un desafío para todos nosotros”.
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4.-Colegio San Marcos, en la comuna de Macul
Como una enriquecedora experiencia pastoral, calificó la vigilia en memoria del Papa Juan Pablo II realizada en el colegio San Marcos, el rector de dicho establecimiento educacional, diácono Pedro Flores. A la jornada de oración asistieron más de 600 personas, mayoritariamente jóvenes y padres de familia.
“Esta vigilia ha sido un aporte extraordinario al trabajo pastoral que se realiza en el colegio. Nuestros alumnos no habían nacidos cuando Juan Pablo II visitó nuestro país, en abril de 1987, y ahora tuvieron la oportunidad de conocer el mensaje que dirigió a los jóvenes de aquella época. Se sintieron muy tocados por las palabras del Santo Padre”, dijo Pedro Flores.
La vigilia en el San Marcos se inició a la una de la madrugada con momentos de oración. A las cuatro de la mañana se ofició una Eucaristía presidida por el Pbro. Rodrigo Domíguez, párroco de la parroquia El Buen Pastor. Luego, los asistentes siguieron por televisión las exequias del Papa desde Roma, finalizando con un momento de oración.
5.-Misa de los trabajadores
A primera hora de esta mañana, viernes 8 de abril, el mundo del trabajo se movilizó para despedir a Su Santidad el Papa Juan Pablo II. Simultáneamente en Telefónica y en la Dirección General del Registro Civil e Identificación se congregaron más de un centenar de trabajadores para dar gracias por el Papa Juan Pablo II.
El Padre Ignacio Muñoz, acompañado por el Capellán de Telefónica, P. Mauricio Hourton, destacó que Juan Pablo II fue el autor de la primera Encíclica en la historia de la Iglesia sobre el trabajo, Laborem Exercens, a través de la cual explicitó el valor del trabajo humano.
El Pbro, Ignacio Muñoz destacó además que la “empresa debe convertirse en una comunidad como decía el Papa, es decir, en comunión, donde todos sean importantes y la centralidad se encuentre en las personas”.
Se recordó también, como otra muestra del gran interés que sentía el Papa por el mundo laboral, el encuentro que sostuvo con los trabajadores en Concepción, durante su visita al país en 1987, en cuyo mensaje destacó la importancia del trabajo humano.
Fuente: DOP Santiago