En el antiguo testamento cuando los judíos querían hacer penitencia se cubrían la cabeza con ceniza. Ese miércoles, al comenzar la Cuaresma, la Iglesia también usa el polvo para marcar este tiempo de penitencia, ceniza que hace presente que esta vida termina y que es necesario convertir el corazón a Dios, poniéndolo por sobre las cosas superfluas, que son perecederas.
En este mismo contexto, la Iglesia invita al ayuno, del cual surge la caridad, la solidaridad, compartir los bienes terrenales con los más necesitados, lo que toma forma en la Cuaresma de Fraternidad, que por tercer año consecutivo estará destinada a reunir recursos económicos para financiar proyectos y programas sociales que vayan en directo beneficio de jóvenes, hombres y mujeres, que se encuentren en situación de vulnerabilidad, según lo anunció el vicepresidente de Caritas Chile, Padre Rodrigo Tupper, quien formuló un llamado a toda la comunidad nacional, especialmente a los católicos, a colaborar con esta iniciativa que se prolongará hasta Pascua de Resurrección, el 24 de abril.
“Tenemos 40 días para colaborar con esta campaña y así poder cambiar la historia de miles de jóvenes entre 14 y 24 años que sufren falta de oportunidades en educación y de acceso a un trabajo digno; que son estigmatizados por su condición y vistos como una amenaza para la sociedad”, señala el Padre Tupper.
¿Quiénes son jóvenes vulnerables?
“Son aquellos que viven situaciones familiares complejas y adversas, víctimas de abandono, maltrato, explotación o abuso, que los hace vulnerables a situaciones de conductas de riesgo de adicciones o delincuencia”, señala.
¿Cómo ayudar?
El Padre Rodrigo Tupper explica que para colaborar con esta campaña los interesados pueden retirar, desde sus respectivas parroquias o capillas, las alcancías donde durante estos 40 días pueden ir depositando el dinero producto de las privaciones de este tiempo de Cuaresma. Además, se pueden hacer aportes en la cuenta corriente Nº 187593, del Banco Estado, a nombre de Cuaresma de Fraternidad. Los dineros recaudados van al Fondo Nacional Común de Cuaresma, que financiará los proyectos aprobados en favor de este sector de la juventud chilena.
Fuente: DOP Santiago - www.iglesiadesantiago.cl