“Patroncitos” acogidos con cena navideña en la Universidad Católica de la Santísima Concepción
Llegaron en tres buses muy contentos. Hombres y mujeres sencillos, pero alegres, bajaron con lentitud y caminaron hasta el edificio. Parecían conocer muy bien el lugar. Saludaron y fueron lentamente ocupando los puestos. El gran comedor del casino de la Universidad Católica de la Santísima Concepción se vio completo de los “patroncitos”, personas que en situación de calle acuden a diario a buscar refugio y apoyo al Hogar de Cristo.
Esta vez, como en dos años anteriores, eran los invitados a la cena de Navidad; eran los protagonistas del gesto de amor y solidaridad que directivos, académicos, funcionarios y alumnos organizan a través de la Pastoral Universitaria. Así se vio al padre Cecilio de Miguel, director de la Pastoral, preocupado que todos y cada uno de los invitados fueran especial y cálidamente atendidos.
La presencia de Monseñor Ricardo Ezzati fue recibida con aplausos y con cariño. Muchos lo felicitaron por su nombramiento como Arzobispo de Santiago. No faltaron quienes lo abrazaron. El Pastor lucía sonriente y contento. Se acercó a cada una de las mesas y los saludó con afecto.
Junto a los invitados estaba el padre Julio Stragier, capellán del Hogar de Cristo, quien compartió la cena y valoró el gesto de los universitarios.
Monseñor Ezzati les dijo, en su mensaje, que quería saludarlos y expresarles su alegría personal como Gran Canciller de la universidad que tiene el sello del Evangelio del Señor. “Ustedes saben que el Señor tiene unos privilegiados, unos amigos muy cercanos; y los amigos cercanos de Jesús son justamente aquellos que más necesitan de amor, de comprensión, de una mano tendida que exprese acogida”.
Con gran respeto y con afecto fraterno del Señor, los invitó a sentirse como en su casa y que disfrutaran el compartir alrededor de la mesa. “Que la esperanza que el Señor nos regala en Navidad, sea también la luz que ilumina los ojos y las almas de cada uno de ustedes. Quisiera desearles una Navidad llena de paz, porque acogemos al Hijo de la paz. En el Evangelio de San Juan se dice una cosa muy bonita: que Jesús vino entre los suyos y los suyos no lo acogieron, pero a aquellos que lo acogieron les dio la potestad de llegar al Hijo de Dios. Mi deseo es que cada uno de ustedes sea de esas personas que saben acoger al Hijo de Dios, para que puedan descubrir y gozar la bondad de ser sus hijos”.
Junto con desearles Feliz Navidad, Monseñor agradeció a los integrantes de la Pastoral Universitaria por hacer posible el encuentro. La jornada, además, fue animada con canto y música.
Fuente: Comunicaciones Concepción