Ver galería de fotos

La eucaristía fue concelebrada por presbíteros y religiosos de la Zona Norte y a ella concurrieron la alcaldesa de Recoleta, Sol Letelier, los concejales; el subsecretario de Minería, Pablo Wagner; la diputada Claudia Nogueira y numerosos fieles y comunidades de parroquias del sector.

En su homilía, el Arzobispo de Santiago recordó su reciente visita a la mina San José y destacó la fe, la esperanza y la solidaridad que apreció en los mineros atrapados, sus compañeros, familiares, autoridades y personal que trabaja en su rescate. Refiriéndose al salmo de la misa, que señala “confía en el Señor, él hará su obra”, dijo que “el que confía y no opta por los caminos de la desconfianza es porque cree que el Señor es bueno”.

Toda vida es infinitamente valiosa

Luego, el Cardenal destacó lo grande que es la vida humana que no se ha escatimado gastos para rescatar con vida a los 33 mineros. “Qué hermoso es pensar que en nuestra patria una vida valga tanto. Y qué bueno seria que todas las vidas valieran tanto, aun las vidas que vienen en camino para nacer. Tengamos conciencia que cada vida tiene un valor inconmensurable y, por lo tanto, cuando viene en camino lo que digo en mi corazón es ‘confía en el Señor él hará su obra’. Y la está haciendo paso a paso”.

Finalmente, llamó a todos a unirse “con todo Chile, como una gran familia, con enorme confianza” y aseguró que “uno de los mejores regalos que recibimos al comenzar las celebraciones del Bicentenario es lo que está ocurriendo ahí en esa mina San José, concertando voluntades por el bien y haciendo que personas vivan con tanta fe, con tanta fortaleza, con tanta capacidad de lucha interior, porque la vida vale infinitamente. Es un don de Dios”.

Fuente DOP www.iglesiadesantiago.cl

 Cardenal Errázuriz presidió misa por mineros en la Recoleta Domínica