Como un sentido homenaje para los 33 mineros que continúan atrapados en la Mina San José, en el norte de nuestro país, cerca de 15 mil jóvenes caminaron por las calles de Santiago en lo que fue la versión 2010 de la Caminata de la Solidaridad que organizan cada año la Vicaría de la Esperanza Joven y la Fundación Padre Hurtado.
Bajo un sol primaveral, los rostros de los jóvenes lucían aún más llenos de entusiasmo y alegría mientras participaron de los diversos momentos preparados para alabar y sentir a Jesús más presente que nunca en este Bicentenario de Chile.
Bailes, canciones, momentos de regocijo y oración fueron parte de esta jornada que comenzó a las 13:00 horas en Estación Mapocho, donde los jóvenes disfrutaron de la animación que lideró el Pbro. Galo Fernández, Vicario de la Esperanza Joven, en compañía de Rector del Santuario del Padre Hurtado, Padre Paul Mackenzie, Capellán del Hogar de Cristo, y junto al Coro de la U. Alberto Hurtado y el Team del Colegio Isabel la Católica.
Luego de una liturgia de la palabra marcada por los duros hechos que han golpeado a nuestro país, cerca de las 14:30 se hizo el envío para que la columna iniciara su caminar por calle Balmaceda para recorrer las tres estaciones en las que voluntarios del DuocUC, Salesianos y Pastoral Juvenil de la Zona Oeste, animaron los pasos de los peregrinos que llegaron finalmente a la estación Santuario Padre Hurtado, donde se desarrolló la última parte de esta caminata.
Por un Chile más fraterno
Al arribar la columna al Santuario, se inició un acto artístico que hizo énfasis en la necesidad de celebrar en este año Bicentenario, la identidad chilena, como expresión de la solidaridad y de la hermandad que se han manifestado de forma especial este año.
Luego de este acto se inició la liturgia final que fue encabezada por Monseñor Cristián Contreras, en la cual jóvenes voluntarios le presentaron sus testimonios llenos de sueños para este país en esta celebración histórica.
Los jóvenes expresaron que sueñan con un Chile más fraterno y que han vivido esta caminata como un compromiso con las causas que persiguen en cada uno de sus quehaceres. Esta tarde los jóvenes quisieron decir sí a Cristo, y renovar su compromiso con un país de hermanos donde todos cabida. Asimismo, los jóvenes pidieron por todos los hermanos que han sufrido durante este año, especialmente por las víctimas del terremoto, del maremoto y por los 33 mineros de la Mina San José y sus familias.
Durante su intervención, Monseñor Cristián Contreras destacó que con su caminar los jóvenes reflejan lo que el cristianismo realmente es: “Son ustedes, caminantes y peregrinos, los que deben llevar esta buena noticia de Jesús a sus hermanos, pero para ello primero deben conocer al Señor. Ustedes están llamados a renovar el cristinanismo a través de su camino de alegría, salvación y su compromiso con Jesucristo, que es el rostro de todos los hombres y mujeres de nuestra patria”.
Monseñor finalizó su homilía pidiendo al Padre Hurtado, gran caminante, que “nos ayude a ser otro Cristo para nuestros hermanos más desposeídos, más pobres y que más sufren”.
La caminata concluyó con la visita de los peregrinos a la Cripta de San Alberto Hurtado.
Fuente: Comunicaciones Vicaría de la Esperanza Joven