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Un auditorium completamente lleno, y un respetuoso silencio hacían presagiar la importancia y expectación de la exposición que se iniciaría a eso de las 18 horas de este jueves 19, en el Salón de Honor de la Casa Central Universidad Católica.

Organizado por el Área Pastoral Social de la Conferencia Episcopal de Chile (CECh), la Fundación Cardenal Raúl Silva Henríquez, y la Unión Social de Empresarios Cristianos(USEC), el seminario “Hacia una Economía Civil y de Comunión a la luz del pensamiento de Chiara Lubich y a Carta Encíclica Caritas in Veritate”, se inició con un saludo de Mons. Manuel Camilo Vial, Obispo de Temuco y Presidente de la Pastoral Social – CARITAS , quien tras agradecer la valiosa exposición de Zamagni, recordó la intervención de S.S. Juan Pablo II, en Chile, durante su visita a la CEPAL y la necesidad de construir una “Economía de la Solidaridad”.

“La necesidad de fortalecer la sociedad civil sigue siendo en Chile un desafío pendiente para poder avanzar hacia un desarrollo inclusivo, para hacer de nuestro país una “Mesa para todos y todas” sus habitantes, como hemos insistido desde la Conferencia Episcopal de Chile”, señaló Mons. Vial, destacando la vigencia de dicha invitación en la reciente Encíclica Social, “Caritas in Veritate”.

Posteriormente fue el turno del profesor Zamagni, quien inició su exposición indicando que la actual crisis económica, -a diferencia de la de 1929-, posee un carácter entrópico, al provocar un colapso en el sistema, propio de una pérdida de sentido en su caminar.

“Esto trajo una revalorización del estudio de la Economía Civil, puesto que la Teoría Económica actual es limitada, al descartar la reciprocidad y el principio de gratuidad”, señaló Zamagni. VER VIDEO

El economista, indicó a su vez, que esta “resurrección” de la Economía Social, se debe a que grandes problemas como “el aumento de la riqueza y el simultaneo crecimiento de las desigualdades”, la incapacidad para “resolver el problema de los bienes comunes, como el medioambiente” y la “paradoja de la felicidad, que indica que pasado un cierto umbral de ingresos económicos la felicidad de las personas decrece”, no pueden ser resueltos bajo las actuales paradigmas asociados a la vinculación de la generación de utilidades. “Nuestros sistemas son buenos para producir riquezas, pero malos para redistruibuir (…) y no podemos resolver estos problemas sin una efectiva reciprocidad. Es una vergüenza que se asocie la generación de utilidades a un aumento de felicidad. Existe un límite en donde a mayores ingresos la felicidad sólo disminuye. En Europa y en Italia, donde los ingresos son muy altos tenemos ese problema. En América en tanto, el problema es que la gente no obtiene los ingresos que le permitan alcanzar un buen nivel de felicidad”, indicó el economista.

Finalmente, académico de la Universidad de Bologna manifestó que “debe existir un mercado de capitales para financiar obras de las empresas de la economía social”, y que sobre esta premisa, espera poder crear en el corto plazo una “Bolsa Social”, de donde se pueda obtener dicho financiamiento”.

Como cierre del encuentro, tras la exposición de Zamagni se dio paso a una ronda de comentarios, en la participaron Rolando Medeiros, presidente de la USEC, Vicente Caruz, presidente de la Sociedad de inversiones Norte-Sur, el Pbro. Luis Rifo Feliú, Vice-Gran Canciller de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, y Nello Gargiulo, Secretario Ejecutivo de la Fundación Cardenal Silva Henríquez, quien a nombre de los presentes junto a Mons. Manuel Camilio vial, entregó a Zamagni la medalla conmemorativa del Centenario del Cardenal Raúl Silva Henríquez.

Fuente: Comunicaciones CECh, Pastoral Social - CARITAS

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