Entre sus puntos la Comisión Justicia y Paz señala que se necesita un esfuerzo compartido entre todos los sectores de la ciudadanía, sin que esto signifique asumir las responsabilidades que le competen específicamente al Gobierno, y llaman también la atención respecto de que cualquier esfuerzo de reconstrucción debe considerar la opinión de las personas afectadas, apoyando en el rescate de sus identidades comunitarias y regionales.

Llaman, también, a comprender que esta urgencia no ha terminado. Que dada la magnitud del terremoto y maremoto y la extensión del territorio que abarcó, la cantidad de personas que han visto su vida fuertemente afectada, se requiere de una solidaridad sostenida, que no se acaba en el evento sino que debe ser permanente.

Invitan también a reflexionar sobre las situaciones que nos devela esta catástrofe, en el año del Bicentenario, con miras a la construcción del Chile que queremos: inclusivo, con equidad, con seguridad para la vida y con profundo respeto de los derechos y la dignidad de las personas.

Fuente: Comisión Nacional Justicia y Paz CECh