Arzobispo de Santiago pide un orden social más justo, en día de los trabajadores
Arzobispo de Santiago pide un orden social más justo, en día de los trabajadores

Un llamado a construir un orden social más justo, que permita reducir la brecha entre ricos y pobres en el país, formuló el Cardenal Francisco Javier Errázuriz, durante la Misa que presidió en el Día Internacional de los Trabajadores, fecha en que la Iglesia celebra la festividad de San José Obrero, instituida por el Papa XII en 1955.

El oficio religioso fue concelebrada por Monseñor Ricardo Ezzati, Obispo Auxiliar de Santiago; el Vicario de la Pastoral de los Trabajadores, Pbro. Ignacio Muñoz; y numerosos vicarios y sacerdotes.

A la Misa – oficiada en el templo de la Gratitud Nacional- asistieron autoridades de Gobierno, parlamentarios, dirigentes sindicales, de organizaciones sociales y de comunidades cristianas de base.

“Un orden social justo es aquel en el cual todas las diferencias –económicas, habitacionales, de educación, etc.- nunca son abismantes, nunca son humillantes ni irritantes, nunca manifiestan soberbia, porque nunca deben contradecir la realidad fundante de nuestra existencia social: somos hermanos porque Dios nos regaló la dignidad sorprendente de ser sus hijos. Éste es el fundamento de la paz social; éste es le verdadero bienestar. Todas las diferencias que contradicen esta verdad, son fermentos de enemistad y, en último término, semillas de violencia”, dijo el Cardenal Errázuriz en su homilía.

“Construyamos este mundo –agregó el Arzobispo de Santiago- haciendo valer esta realidad en todas nuestras relaciones (...) Colaboremos en la gestación de un clima laboral que exprese aprecio mutuo, valoración de la fuente de trabajo, benevolencia y solidaridad. Apoyemos todos los esfuierzos de quienes tienen responsabilidades directivas, para que el fruto del trabajo redunde en mayores beneficios de capacitación, de previsión social, en mayor participación, en mejores oportunidades para los hijos, y en tantas otras expresiones de esa realidad profunda que nos une: nuestra fraternidad. Y en la construcción de la sociedad abrámosles camino a quienes son más honrados y veraces, y buscan establecer los fundamentos de la paz, propiciando la justicia, el diálogo, la preocupación por los más aflijidos y los marginados, en una palabra: los que impulsan una sociedad cuya base sea la fraternidad”, terminó señalando el Cardenal Francisco Javier Errázuriz.

Santiago, 01 de Mayo, 2003

Especiales de Iglesia.cl