La misa fue presidida por el presbítero Cecilio de Miguel, de nacionalidad española, quien es el director de Pastoral de la Universidad Católica de la Santísima Concepción.

El padre Cecilio transmitió en su mensaje que “todos formamos la gran familia de los hijos de Dios. Ahí está el principio de la dignidad humana, porque somos a hechura de Dios. Tenemos el destino que nos lleva a Dios, pues hemos sido redimidos por Cristo. Son los grandes motivos que luego podemos ahondar, porque somos hermanos. La solidaridad humana y la fraternidad, son realidades que todos sentimos”.

Afirmó, además, que “cuando uno vive esto, no importa tanto donde vive, aunque indiscutiblemente donde uno vive tiene que procurar, primero, cumplir todo aquello, que se le pide, porque uno es ciudadano más del lugar donde llegó y tiene que ser respetuoso, que es la única manera de que se nos respete. Podemos dialogar, porque tenemos tantas cosas en común, son muchas más las cosas que nos unen y mucho menos las cosas que nos dividen”.

En su experiencia personal, el padre Cecilio comentó: “Yo suelo decir que primero vine por una temporada y llevo 16 años y en segundo lugar, que me enseñaste una canción que además aprendí, que he cantado tantas veces: y veréis como quieren en Chile al amigo, cuando es forastero. Y aquí nunca me he sentido forastero, porque uno se siente atrapado y querido por este pueblo que es de geografía muy larga, pero es tan ancho su corazón que ojalá que lo que yo siento es lo que sienten los que se acercan a este país”.

Respecto a la preocupación de la Iglesia por promover la acogida a quienes llegan de lejos, el padre Cecilio, señaló: “Es tan importante esto, porque tenemos que darnos cuenta que el primer migrante es nada menos Aquel que deja la vida del Padre para hacerse hombre, que es su hijo, Jesucristo. Él, después va a vivir lo que es la migración. Se ve obligado a ir a Egipto como muchos, que han tenido que venir por distintas circunstancias para acá. Lo importante es encontrar un gran lugar de acogida, porque vienen dispuestos a querer a aquellos con los que se encuentra”, concluyó.

Los extranjeros presentes en la misa tuvieron una activa participación en la liturgia y además, brindaron, en las ofrendas, su ayuda en alimentos no perecibles. En la oportunidad, Luis Navarro, funcionario de Extranjería de la Gobernación Provincial y miembro de la Pastoral del Migrante, comentó que en la zona residen aproximadamente 9.000 extranjeros de diversas nacionalidades, cerca del 50% de ellos reside en Concepción. Precisó que muchos extranjeros son católicos. Indicó que en la preparación de la eucaristía del Día del Migrante participaron los hermanos peruanos residentes. De manera especial se invitó, este año, a hermanos mapuches, quienes llegaron a la catedral luciendo también sus vestimentas típicas.

Fuente: Comunicaciones Concepción